Rᴏᴄᴇs♡︎

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hmmmmm
migajas

Aquella música resonaba por toda la casa, nuestros queridos héroes estaba disfrutando de una "pacífica" fiesta que el amante de morado había hecho en su casa

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Aquella música resonaba por toda la casa, nuestros queridos héroes estaba disfrutando de una "pacífica" fiesta que el amante de morado había hecho en su casa.

Por supuesto, esto no hubiera pasado si aquel rubio de ojos esmeralda hubiera estado "jodiendo" al chico que al final termino por aceptar.

Todos disfrutaban de las bebidas de aquella fiesta, que en su mayoría se trataba de vino y cerveza.
Casi todos estaban totalmente alcoholizados, cada uno en su propio mundo.

Y esto no era la excepción, dos chicos se encontraban charlando en el sofá de aquella gran sala, Luzu estaba más sobrio que nada, mientras que su acompañante, Quackity, estaba casi a punto de quedarse dormido por el alcohol.

-Lusu~ que bonitos ojos tienes Lusu~- Llevo una de sus manos a la mejilla del mayor el cual solamente se ruborizo.

-G-gracias Quacks - respondió nervioso.

Aquel híbrido de pato había estado insinuandose mucho ante el con actitudes coquetas. Está no era una gran diferencia, el de ojos carmin había notado estos comportamientos, y obviamente lo primero que hizo fue emocionarse, luego pensó seriamente en que quizá aquello era una simple broma que quedaba entre amigos. Pero después... Eso se convirtió en algo más constante, confundía cada vez más a su mente y no sabía que pensar con exactitud.

El patito se estaba acercando de sobre manera al ojirubí, tanto que sentía como sus respiraciones chocaban, al punto de poder sentir unos roces de los labios del contrario sobre los suyos.
Obviamente, esto no iba a quedar como broma entre todos, la gran mayoría estaba en su propio mundo, disfrutando de todo lo que el ojivioleta les ofrecía.

Todo pensamiento se cortó cuando los labios del patito impactaron con los del castaño, formando un beso. Solamente que este había empezado de manera torpe para luego comenzar a escalar aquella pasión y amor que se tenían mutuamente.

El beso se hacía cada vez más húmedo, la situación estaba comenzando a ser calurosa para ambos, claro, los demás aún no notaban nada ya que estaban más borrachos que nada.
En la cabeza del castaño, esto simplemente era hecho por impulso, quizá a la mañana siguiente esto sería olvidado por ambos.
Pero lástima que no era así.

Aquel pato de cabellos negros sabía perfectamente lo que estaba haciendo, hace tiempo quería hacer aquello, quería probar aquellos labios rosas que lo llamaban, quería probar aquellos sentimientos tan puros...

𝗗𝗶𝗼𝘀 𝗡𝗼𝘀 𝗛𝗮 𝗔𝗯𝗮𝗻𝗱𝗼𝗻𝗮𝗱𝗼...𝖮𝗇𝖾 𝖲𝗁𝗈𝗍𝗌 𝖫𝗎𝖼𝗄𝗂𝗍𝗒🔞 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora