Los mejores años de mi vida (Única parte)

Los mejores años de mi vida

El simbolismo mágico de las luciérnagas nos sugiere que todos podemos ser luz en medio de la oscuridad. Si despertamos nuestro potencial, ilusión y sentido de la esperanza, podremos también contagiar a otros para iluminar los momentos más complicados.

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El susurro del llanto de un bebe, alboroto en la sala, una cantidad exorbitante de profesionales de la medicina, enfermeras, doctores, asistentes, todos celebrando la llegada de un nuevo ser al mundo terrenal.

La llegada fue difícil, fue un acontecimiento sorprendente y milagroso, la pequeña niña que yace en los brazos de su madre con fuerzas y puede respirar; más tarde que temprano es arrancada de los brazos de la mujer que la ha parido para poder reanimar el pequeño corazón de la criatura; incontables procesos médicos para poder mantener completamente sana y viva a la pequeña.

Año uno.

Los primeros meses de vida habían sido caóticos para la familia entre meses lejos de su núcleo familiar, procesos invasivos para su pequeño recipiente de carne y huesos. Aun así, la pequeña se mantuvo paciente y con fuerzas suficientes para cumplir un año; eso sí, ¿cómo fue su cumpleaños? Solo los padres podrían contestar esa pregunta, ella no era consciente de ello, simplemente comenzó el proceso de vinculación a su núcleo familiar, con una madre devota a su familia, un pequeño mitad demonio mitad ángel como hermano y un padre absolutamente trabajador.

Año tras año.

Los años pasaron, la familia se mudo de estado para alcanzar una mejor vida, a la cual les fue difícil de adaptarse, pero no imposible, recibieron familia de visita, muchos animales exteriores en su jardín interior que prácticamente era un terreno; hasta que cambiaron el terror de los animales por fantasmas y de fantasmas a ladrones. No hubo descanso en ese tiempo, un robo y una muerte definirían en lo que se convertiría esta familia, ya nadie viviría tranquilo por unos años.

Mientras tanto la pequeña niña crecía protegida y sobre protegida por la familia, saber que el milagro quizás no se podría repetir martillaba poco a poco la paz de los padres.

No había cosa por la cual la pequeña pudiera ser perturbada, excepto, un pensamiento muy escondido dentro de ella, que ni siquiera años después podría identificar como un temor máximo, el abuso sexual. Conocía el termino, el abuso psicológico había estado presente en ella y había sido un factor en el moldear de su carácter.

Transición

El moldear de su carácter se formo en diferentes etapas, con diferentes personas, amistades, familia y la muerte; recuerdos, sueños y lo que podrían ser vistazos de vidas pasadas.

La definición de amistad aun pende de un puente muy estrecho y desgastado, por el cual han pasado muy poca personas gracias al aprendizaje de la desconfianza. Gente que aun forma parte de su vida y gente a la cual logró sacar de ella.

La familia ha creado este ser que a pesar de ser fuerte aun se cree pequeña, alguien que aun no termina de creer en sus capacidades, por la cantidad de frases que giran dentro de su cabeza.

La muerte, al principio solo fue la desaparición de alguien, un término inexplorado, y con terminologías inconclusas, poco entendibles. Después se convirtió en el comienzo de una caída libre dentro de un volcán sofocante, que conforme cae se ve aun más oscuro y se encuentra más caliente cada vez, imposibilitando la respiración, y con un fin interminable. El tercer golpe no fue tan doloroso, pero demostró lo fácil que es entrar en negación e inventarles un nuevo final a los hechos reales.

Incluso antes de perder a su alma gemela existió una caída más larga que causo un primer desastre en sus vidas, el suicidio, aunque "insignificante", un cambio y todo acabaría. El pedido de auxilio más silencioso e instantáneo. Ese día no hubo sangre, solo un alma desgarrada, 3 pares de ojos destrozados por el llanto y mucha confusión. Aun nadie puede saber de ello, nadie supo cómo afrontarlo con palabras y algo se rompió ese día.

Llego la preparatoria, vivió muy feliz en esa época haciendo lo que le encantaba, estudiar, platicar y tener amigos reales. Incluso ese puente quebradizo del que les hable fue resanado por ellos. Vivió en paz esos años, incluso tuvo la creencia de que lograría todo lo que ella se propusiera, simplemente porque ella lo quería así, nuevamente se equivocó. Sus miedos la detuvieron, pero eso no causo su derrota, una carencia de memoria fue lo que la causo, y sigue sin comprender porque sucedió, cuando no debía pasarle a la señorita perfecta.

Aun así, no se rindió, respiró profundo, y recibió su propio castigo, la permanencia; quizás el primero error, pero quizás el primer paso a la realidad misma de su destino.

Nadie nunca lo sabrá, hasta que no sea el momento adecuado para saberlo.

Un nuevo comienzo

Ilusión, expectativa y un "destino truncado", dos muertes, un estrés causado por acontecimientos fuera del alcance del cualquiera que no sea un dios y la tristeza de perderse en el camino.

Este no ha sido el mejor comienzo, pero es el primer avance de todos los comienzos y finales que tendrá está historia.

Esta quizás es mi historia, pero puedo decirte fuerte y claro que la puedes reescribir, con tus anécdotas, tus fallos y tus miedos; con todo lo que eres tú, y aun así jamás podrás dejar de escribir un nuevo comienzo; porque lo nuevo nunca permanece nuevo, los errores pueden cometerse una y otra vez, pero siempre tendrás una nuevo comienzo, otro intento de sufrir, llorar, caerte y volverte a levantar.