7

603 68 8
                                    

Al terminar de leer la carta mi mente quedó en blanco, lo primero que hice fue alejar la carta de mis manos con sumo cuidado, no quiero dañarla, lo siguiente fue levantarme y buscar todas las cartas que intercambié con Harry y las coloqué sobre la cama, las organicé por fecha y convertí un Knut que estaba sobre la mesita de noche en una caja para guardar las cartas; las organicé de la más vieja a la más nueva, dejando la que acabo de leer al final de todas, en el fondo de la caja. Al terminar con eso, cerré la caja y conjuré un hechizo de protección que me reconociera solamente a mí, para que solo yo pueda abrir la caja, y la guarde con el mayor cuidado en mi baúl, escondiéndola entre la ropa.

Después de cerrar el baúl me senté encima, apoyé mis codos en mis rodillas y mi cara en mis manos, y mientras pensaba en la carta me di cuenta que estaba llorando de nuevo, me dejé llorar lo que fuera necesario.

Luego de lo que creo que fue media hora ya me sentía mejor, di una respiración profunda mientras levantaba la cara de las manos y me dirigí al baño para lavar mi cara. Al salir del baño caminé hacia la cama y me detuve justo frente a la pequeña caja, conjuré el hechizo de agrandamiento y la caja se hizo del tamaño de al menos dos almohadas de ancho, casi pude estar de acuerdo con Harry por lo del tamaño, pero recordé que en mi casa hay retratos de mayor tamaño.

Al abrir la caja mi respiración se detuvo de inmediato, en el cuadro se veía a Harry con una snitch en la mano después de ganar un partido. Cuando el Harry del cuadro notó que la tapa se había levantado se fijó en quién había sido, y al momento de conectar las miradas ninguno pudo apartarla por varios minutos, los sentimientos de ambos eran muy notorios, a la mierda Malfoy, después de un par de segundos caí de rodillas y solo se escucharon sollozos por al menos otros quince minutos, después de eso mi voz ronca se escuchó.

- ¿Por qué no me dijiste nada antes? -Hubo silencio por unos segundos y se escuchó la clara voz de Harry

- Fui muy cobarde... No quería enfrentarte cara a cara, sabía que me iba a terminar de quebrar, y me costó demasiado mantenerme hasta el final... Lo lamento -La voz fue bajando el tono a medida que hablaba hasta que llegó a ser solo un susurro apenas audible, volví a dar una respiración profunda y solté el aire ruidosamente

- El día que nos vimos, ¿tuviste otra falla mientras estábamos juntos? –No tenía ni la menor intención de ver a Harry en este momento, sé que si lo hacía volvería a llorar por otro buen rato, seguía con la frente contra el colchón de la cama

- Milagrosamente no, fue muy tranquila esa mañana y la disfruté más aún por eso... -Harry dejó de hablar, pero Draco sabía que había algo que aún no le decía

- ¿Y después? -Harry dudó un poco antes de volver a hablar

- ... Como ya tenía la sensación de que estaba en mis últimos días escribí la carta justo al regresar de nuestra salida, el día anterior antes de la cena recibí el cuadro; ya con el cuadro y la carta fui a entregárselos a Neville, y luego fui a la enfermería lo más rápido que pude, tenía un dolor en el pecho muy fuerte y apenas llegué a la enfermería cuando después de empujar la puerta perdí la fuerza en las piernas y la Sra. Pomfrey me vio caer, me ayudó a levantarme y me llevó a una cama para que me recostara, pero si me recostaba sabía que me daría un ataque de tos así que solo me senté, ella empezó con el tratamiento pero de un pronto a otro no podía respirar... -Guardó silencio nuevamente y siguió después de unos segundos- No sé qué tanto pasó desde que no pude seguir respirando, pero lo último que recuerdo es ver llegar al profesor Snape y la profesora McGonagall a mi lado, ambos tenían terribles expresiones en sus rostros, de ahí todo simplemente se hizo borroso hasta que se hizo completamente negro

En el dormitorio, lo único que se escuchaba eran mis sollozos bajos durante otro rato más. Conjuré un tempus y vi que la hora de la cena prácticamente había terminado, no me había dado cuenta que había pasado tanto tiempo en el dormitorio entre leer la carta y hablar con el retrato de Harry; me levanté lentamente y nuevamente fui al baño para lavarme la cara, al salir del baño invoqué un elfo doméstico para que trajera algo para cenar, no tengo ni las menores intenciones ni apariencia como para aparecer en el comedor.

Luego de que el elfo doméstico trajera la comida, la coloqué en el escritorio y me acerqué nuevamente al retrato.

- ¿En qué parte de la habitación quieres estar mientras termina el año escolar? -El Harry del retrato se impresionó un poco por la pregunta, y unos segundos después habló

- ¿Podrías dejarme ver los alrededores de la habitación? –Levanté el cuadro de la caja y lo cargué en brazos para que pudiera ver la habitación mientras le di un recorrido- Por ahora podrías acercarme al escritorio y hablamos mientras comes si quieres –Así lo hice y caminé hacia el escritorio dejando el cuadro cerca del escritorio y sentándome a comer, mientras tanto estuvimos hablando por un buen rato. Después de devolver la vajilla al elfo doméstico me acerqué nuevamente al cuadro.

- ¿Ahora hacia dónde? -Harry dejó caer levemente la cabeza hacia un lado mientras se notaba que estaba pensando

- ¿Te dormirás pronto? –Asentí con mi cabeza- Entonces donde tú creas que sea más cómodo, no tengo particular preferencia y realmente me da un poco de vergüenza saber que puedo verte antes de dormir -Se creó un silencio un poco vergonzoso entre ambos, pero no me importó

-Está bien entonces –Colgué el cuadro en la pared donde está la puerta del baño, no me podrá ver entrar al baño, pero podrá verme dando vueltas por todo el cuarto en cualquier momento, Harry me regaño por la posición que escogí, pero no me importó, estoy satisfecho por su reacción y solo pude reír sin prestarle atención a sus quejas. Hice la rutina de antes de acostarme, y antes de recostarme por completo en la cama volví a hablar- Buenas noches Harry -Hubo un poco de silencio, pero pronto unas palabras bajas se escucharon

- Buenas noches Draco, descansa

-----

Reacciones... Y arrepentimientos que tomaron voz...

Después de este capítulo solamente queda uno, para que sepan .3.

Hasta el siguiente jueves!

Sofía

All that is left behindDonde viven las historias. Descúbrelo ahora