La promesa...

El ¿comienzo? (Epílogo)

La noche era oscura, más oscura de lo normal, una mujer caminaba por el pasillo del hospital psiquiátrico, con miedo, tenia miedo por que no estaba caminando por el pasillo de personas con problemas mentales inofensivos, si no estaba caminando hacia una posible muerte (Vaya ironía).

La bella enfermera de cabellera castaña, ojos cafés, con una personalidad amable, dulce; se dirigía exactamente a la habitación 203, allí estaba el paciente Willian, ese paciente a su corta edad de diecisiete años; ya había asesinado a dos familias enteras, pero en la segunda familia, no contaba que la niña pequeña llamada Sussy Eleonor; había llamado a sus abuelos y estos mismos habían llamado a la policía.

Y así Willian llegó a ese lugar lleno de maniáticos.

La enfermera llegó a la puerta 203, con la respiración agitada y muchos nervios de por medio, introdujo la llave en la cerradura y giró la manija. La enfermera no vio a nadie, hasta que notó algo extraño.

El espejo del baño estaba roto.

Ella había puesto un solo pie dentro de la habitación, cuando alguien salto detrás de ella y le enterró un pedazo de espejo en el cuello; así cortándole la yugular.

Ella retrocedió lo mas que pudo, corrió y corrió, aunque ese liquido viscoso estaba bajando por su cuello y ropa; no le importo y siguió corriendo hacia el botón de emergencia ella miro hacia atrás y vio una figura masculina parada con un pedazo de espejo en su mano izquierda, no pudo ver más ya que había llegado al botón de emergencia.

Lo presionó y vio como se activaban luces rojas por todo el Hospital y vio como la figura masculina se iba rápidamente de allí, cuando la mujer (cansada por cierto) lo vio irse quiso gritar pero su corte en el cuello no servía de ayuda, finalmente se dejo caer al suelo.

Cerró sus ojos y falleció esa noche...