No lo podían describir con palabras, esa gran felicidad, esa sensación de volver justo al lugar donde varios años atrás se conocieron, donde ellos se volvieron novios y ahora justo en ese mismo lugar se habían vuelto esposos, compartiendo aquellos votos que sabrían nunca faltarían a su palabra
- maikol no sabes cuánto te amo-
- yo te amo más Alexis, ahora sabes lo que viene -
- eso no se pregunta lindo, aunque ¿quien inicia? ¿tu o yo?-
Ambos sonrieron en complicidad, maikol se paró para cerrar aquellas ventanas, estaban en una pequeña cabaña en un área menos turística de esa isla, alexis apagó la luz y solo comenzaron, solo empezaron a sentir las caricias sobre el cuerpo del contrario y asi fue toda la noche
Por la mañana no tenían ganas de levantarse, Alexis quien despertó primero vio a maikol totalmente dormido, acomodo un mechón de ese cabello
" Maikol no sabes la alegría que siento que me hayas aceptado como tu novio, te prometo que ahora como tú esposo nunca voy a dejar de amarte, cada día te amo más y mi amor solo continúa creciendo"
Volvió a recostarse usando el pecho de maikol cómo almohada, sintió la mano de maikol sobre su trasero, volteo para mirar a maikol, seguía muy dormido
" Lo haces inconcientemente, bueno siempre me ha gustado que me toques, después de todo no solo mi cuerpo sino también el tuyo tienen tatuadas las huellas del contrario"