Una chica del monton

Capitulo 3-Señor ego

-hey muñeca, ni te enfades que te salen arrugas- se acerca, su cara y su cuerpo están a centímetros de mí.
No sabía que hacer así que retrocedo y me choco con la pared. Mierda ya no tengo salida.

-te pongo nerviosa- susurra sus labios pegados a mi oido. Mi respiración entrecortada hasta que mi cerebro reacciona y digo segura- no, apartate tengo cosas más importantes que estar contigo- Era verdad tenía que ir a una heladería, se llama Tommy's había quedado con Dustin. Me puse a desayunar mis tostadas termino y voy a mi cuarto me cambio de ropa. me visto con unos vaqueros, una camiseta verde y pone "Tipic adolescent" y unas vans blancas con flores. Bajo las escaleras cojo las llaves, lo meto en el bolso y voy a irme, pero Jack me llama desde el salón.

-addy a dónde vas??-pregunta curioso.¡¡¡Pero que le importa!!!
-con una amigo, dile a Nick que llegaré sobre las 11 o 12, adiós- me voy sin esperar a que me respondiera. Abro la puerta y una mano la cierra con fuerza. Me giro y veo a Jack muy enfadado .
-quién es ese amigo tuyo es tu novio??-pregunta con las cejas juntas y la mandíbula en una línea, esta totalmente enfadado.
-no es mi novio y tu no me puedes prohibir nada, no eres ni mi padre, ni mi madre ,ni Nick y no eres nada cercano entonces puedo hacer lo que quiera- digo con frustración y abro la puerta y me voy corriendo a la heladería. Llego y lo veo en una mesa aparte, se gira, me ve y sonríe. Le devuelvo la sonrisa y me siento en frente de él.

-hola,¿estas bien?-pregunta con preocupación. Le sonrio y niego con la cabeza. Me siento en frente suyo.

-no tranquilo estoy bien ¿y tu?-intento cambiar el rumbo para pasar una buena tarde sin pensar en los hormonas alborotadas de mi casa. Después pondré un poco orden pero ahora a disfrutar de la tarde.

-Bien, quieres un helado de turrón como te gustan??- abro los ojos y la boca abierta.

-como... has sabido eso??-se ríe y dice -porque tienes todos mis gustos y lo he intuido,oye sabes que te están mirando desde que entraste aquí -señala con la cabeza hacia una mesa separada por dos mesas.-esta bueno pero no creo que sea tu tipo- dice con tranquilidad, suspiro.

- oye pero tu no deberías opinar sobre esto eres un chico y eso no te pega a no ser que seas... - me interrumpe y dice -gay si lo soy no sé porque te lo digo pero sé que puedo confiar contigo eres diferente a las demás - me quede boquiabierta con sus palabras procesandolas y pienso ¡yupi puedo tener mi mejor amigo gay!
-bueno si confías en mí, no se lo digo a nadie tranquilo y porque piensas que no es mi tipo esta bastante bien- le cambio de tema y miro al chico que me sigue mirando y me guiña in ojo.
-te acaba de guiñar un ojo pues puede que si sea tu tipo eh - se ríe y sube y baja las cejas.
-eh no te adenlantes, parece un mujeriego de esos que tiene a CASI todas las chicas- remarco el casi porque yo no seré una de su lista.

De repente veo que se acerca la camarera con un batido de fresa y una nota me lo da. Miro un poco confusa a la camarera.
-es de ese chico que te esta mirando en esa mesa- dice la camarera tranquilamente.
-gracias-miro al chico y sonríe como diciendo soy-sexy-lo-sé, no soporto a ese tipo de chico.
-que dice la nota-me saca de mis pensamientos un Dustin curioso. Leo Soy Adam y mi número de teléfono es ... llámame. QUE SE CREE ESTE IMBÉCIL!?!?!
-por favor otro imbécil con el ego muy subido- digo con frustración ya me estoy hartando de tener que soportar más señores ego.
Siempre pienso como a la mayoría de chicas les puede gustar ese tipo de chicos, yo no creo poderme acercar a mas de un metro sin querer matarlos o que me saquen de mis casillas. Nos volvemos cada vez más tontas o ciegas.
Dustin y yo nos ponemos a salir para ir a mi casa a cambiarme para ir a una discoteca, ya llegamos y veo que estan todos los coches de Nick, Peter y el inquilino(Jack). Entro con Dustin y veo a Nick a punto de explotar y se gira como la niña del exorcista.

-hola, me cambio y nos vamos.-dije tranquilamente aunque sabia que me empezaría a dar un sermon por eso cogo a Dustin y subimos corriendo.