Lan XiChen era el punto esencial de algunas miradas coquetas y de muchas otras cargadas de ternura tanto de mujeres como de hombres, podía suponer a qué se debía, pero prefirió concentrarse en su deber.
Escuchó el pequeño gimoteo de su sobrino y le sonrió mientras agitaba una sonajera frente a él, el pequeño lo veía desde la cangurera casi hipnotizado por el movimiento del sonajero y Lan XiChen no podía sentirme más realizado que ahora.
WangJi lo estaba esperando en la corporación Gusu y él al querer pasar más tiempo con su sobrino prefirió caminar todo el trayecto desde el departamento de su Didi hasta la corporación. El pequeño sin duda alguna tenía los ojos de la familia Lan, pero su cabello era ondulado como el de su otro padre y más claro de igual manera, aunque sí Lan XiChen tuviera que decir algo al respecto diría sin dudarlo que el bebé era igual a su Didi cuando era así de pequeño.
Llevaba la pañalera y nada parecía faltarle al presidente de la corporación Gusu, pero no se sentía cómodo con tantas miradas sobre él; se había ofrecido a cuidar de su sobrino mientras WangJi asistía a una reunión de imprevisto e hizo intencionalmente un espacio en su agenda sólo para eso, claro que WangJi no lo sabía de lo contrario habría dejado a su sobrino con su Niang o con Wei WuXian, pero no podía permitirlo cuando tenía la oportunidad después de casi una semana sin ver su tierno rostro.
Si alguien pensó que era un tío consentidor nadie lo comentó, pero es que el Lan mayor no podía sentirse más enamorado de lo tierno que era su sobrino, quizás no tenía el mejor prospecto de padre según su Shufu, aunque para Shufu nadie era lo suficientemente bueno para WangJi, el pequeño volvió a gimotear con alegría y Lan XiChen tuvo un colapsó interno al escucharlo casi reír, no tenía poco más de seis meses, pero ya tenía el corazón de la familia Lan en sus manos, incluso sí su Shufu intentaba hacerse el desentendido.
Cuando llegó a la corporación todas las miradas siguieron estando sobre él y el pequeño en la cangurera, todos lo saludaron con una profunda reverencia, pero la atención se la llevaba mayormente su sobrino. WangJi era el vicepresidente de la corporación y, aunque ambos se encargaban de la empresa, normalmente Lan XiChen era quien tenía que ocuparse de los viajes de negocio o el trato directo con otras empresas para futuras asociaciones, debía estar al tanto de las juntas, aunque debido a su extenuante horario no era necesario que asistiera a todas ellas.
Apenas vio a su Didi se sintió casi desconsolado por tener que dejar a su sobrino, Lan XiChen no buscaba formar una familia todavía, pero se sentía como si lo separaran de una parte de su corazón.
Entró a la oficina de su Didi y él se levantó apenas lo vió con el pequeño en la cangurera, se notaba su preocupación y alivió a pesar de mantenerse imperturbable —WangJi, ¿Cómo te fue en la reunión?
Lan WangJi tomó la pañalera que su Xiongzhang tenía sobre su hombro y sonrió levemente al notar la gracioso que se veía el Lan mayor con un bebé en una cangurera portando una sonajera en su mano y vistiendo un traje de primera mano. Sabía que su Xiongzhang había hecho espacio intencionalmente en su agenda sólo para cuidar de su hijo, pero parecía tan encantado de cuidarlo por teléfono que no pudo negarse a dejarlo a su cuidado, incluso si el Lan mayor tenía responsabilidades que debía atender.
—Aceptable. Debemos encargarnos de la contabilidad de las pequeñas extensiones en el extranjero, pero después podríamos dejarlas a cargo de alguien capacitado —. Lan XiChen asintió conforme a lo que su Didi le decía, pero tendrían que ver los detalles más adelante.
Una pregunta tácita se formó en la mirada de Lan WangJi y Lan XiChen sonrió complacido por responder —Luo Tian, se durmió apenas llegué y luego le di de comer cuando despertó, de camino aquí jugó con la sonajera y puedo decir que ya te extrañaba, WangJi —, Lan WangJi sonrió a su bebé y lo tomó entre sus brazos al mismo tiempo que este se aferraba a la tela de su traje azul; amaba tenerlo entre sus brazos, no fue fácil durante su embarazo, pero su esposo siempre fue muy atento y cada momento había valido la pena.
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What we build [Lan WangJi/Luo Binghe]
Fanfiction"Luo Binghe hablaba el lenguaje del amor en cada mirada, en cada suspiro y en cada palabra, Lan WangJi aprendió a hablarlo también sólo por él". Es una mini historia dedicado a una pareja impensable, que sí bien no es de preferencia particular en el...