Pesadillas

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Y entonces el mundo desapareció para el Primer Vengador, fue como un chorro de veneno entrando directamente en su cabeza, haciendo que la realidad se volviera confusa.

Ya no estaba en la fortaleza de Strucker, los golpes habían cesado, el sonido de la batalla había desaparecido, en su lugar ahora lo único que el Primer Vengador escuchaba era una alegre melodía que no había escuchado desde los cuarenta, antes de quedarse sepultado bajo una enorme capa de hielo.

Estaba desorientado, no sabía lo que ocurría, a su alrededor lo único que quedaba era un bar de Brooklyn, un bar donde ya había estado durante sus tiempos como combatiente de la segunda guerra mundial.

Esa canción que antes había sido extrañamente relajante y animada ahora tenía un efecto ligeramente alarmante y sospechoso para Steve. El Capitan America miró a su alrededor. Se sentía encerrado, pero había una extraña sensación de familiaridad en el lugar.

El nerviosismo de Steve aumentó progresivamente hasta que escuchó una voz conocida a sus espaldas.

-Steve?

Al escuchar su nombre, el hombre de las barras y estrellas se dio la vuelta, solo entonces notó que no estaba usando el traje rojo y azul con rayas blancas tan llamativas que lo caracterizaba. Y tras voltear, pudo ver frente a él a una mujer.

No tenía más de treinta años de edad, una apariencia hermosa y un uniforme similar a la de una militar, Steve la reconoció al instante; Peggy Carter.

-La guerra terminó

El Capitan miró a su alrededor, se sentía demasiado real, no parecía un sueño o una ilusión. Un sentimiento de confusión y paranoia de apoderó del Primer Vengador al volver a escuchar su nombre.

-Steve, todo bien?

Rogers respiró profundamente antes de responder. Parecía que lo que fuera que estaba pasando, era una trampa.

-Si... solo me desorienté por un momento.

Steve siguió observando su alrededor buscando una señal de lo que pasaba, tratando de entender su situación. El mundo parecía moverse de manera más lenta, nadie notaba que Steve estaba mirando activamente a su alrededor buscando algo más.

En su búsqueda por ese pequeño error en la realidad, vio algo que llamó su atención, en la barra del bar en el que estaban sentados varios hombres. El Cap conocía a cada uno de ellos, Namor bebía rápidamente el contenido de una botella de cerveza, mientras que Falsworth, también conocido como Union Jack, pedía una ronda más para él y todos sus amigos. Jim Hammond estaba del otro lado de la barra, mostrándole a unas chicas su mano completamente envuelta en ardientes y luminosas llamas, y por ultimo, Howard Stark, teniendo una tranquila y amistosa discusión con Bucky.

El sargento James Buchanan Barnes, tambien conocido como Bucky Barnes, el mejor amigo de Steve, y quien apenas hace menos de un año había tratado de matarlo. Sabia perfectamente que se trataba de alguien completamente diferente a su amigo, alguien controlado por HYDRA, alguien que solo seguía ordenes a las que no podía negarse, Cap se tranquilizó al ver que faltaba ese potente brazo de metal puro, que lo había sujetado del cuello a punto de matarlo. En su lugar había un común y corriente brazo de carne y hueso cubierto por un abrigo.

Inmerso en su confusión, pero sintiendo una extraña sensación de seguridad, Steve decidió sentarse con sus amigos mientras escuchaba la alegre melodía que alguien tocaba en el piano.

Y de vuelta a Sokovia, en la realidad, Natasha disparaba activamente contra las maquinas, acabando con varias de ellas sin ningún tipo de misericordia, llenándolas de agujeros y aniquilándolas. Completamente inmersa en su batalla, la Viuda Negra no notó cuando Wanda se colocó tras ella y tocó su cabeza antes de hacerla pasar por el mismo proceso por el que había pasado el primer Vengador.

The Darkest Spider: The Carnage of UltronDonde viven las historias. Descúbrelo ahora