Capítulo 3

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5 meses después...

Estoy en casa sentada en el sofá llorando cubierta por mi manta esperando que regrese ya hace tiempo que no se nada sobre el, los recuerdos de las veces que lo ayude con sus adicciones vienen a mi cabeza pero es inútil porque jamás me lo agradeció, el apartamento se siente algo solo, la costumbre de venir y verlo se hizo habitual, el sonido de la puerta hace que mi corazón palpita con desesperación me levanto rápido del sofá corriendo a la puerta, al abrir me encuentro con alguien nuevo

-hola- dice sonriendo

Su estatura media, delgada, el color de ojos azules como un océano calmado, piel blanca suave, cabello negro hasta los hombros, lacio, pestañas largas y rizadas, labios rosados gruesos sonriéndome

-hola- dije asombrada

-soy tu vecina de enfrente

Caigo en la realidad de que una chica me está viendo con los ojos hinchados de tanto llorar, despeinada con el piyama puesto, la vergüenza sube lentamente a mi cara trato rápidamente de secar mis mejillas

-perdon por verme asi- dije algo avergonzada - pasa- corriendo me dejándola pasar

Entra viendo todo alrededor por suerte el lugar está acomodado de la última vez, cierro la puerta, ella se da vuelta sentándose en el sofá sonriéndome lo cual le devuelto la sonrisa algo forzada por mi vergüenza

-no quise venir a molestar- dice inocentemente

- no molestas- sentándome

- vine a traerte un regalo- dándome la caja que tiene entre sus manos

¿Un regalo? tomo la caja algo dudosa, la abro con curiosidad viendo que es el equipo de música que rompí ese ultimo día que a Brandon se le ocurrió la idea de irse, mis ganas de llorar volvieron pero me contengo aunque el nudo de mi garganta duele cada vez mas

-habia un dos por uno en la tienda de ofertas- dice sacándome de mis pensamientos- es que soy nueva aquí y no conozco a nadie y pensé que sería una buena excusa para conocer a mis vecinos

No es mi reproductor de musica sino una coincidencia

-no tenías que hacerlo además yo tendría que haber ido a tu puerta a darte la bienvenida- dejando la caja en la mesa que tengo al frente- ¿quieres café?

-si me gustaria- dice

Voy a la cocina mientras conozco más a mi nueva vecina para tener una conversación así nos conocemos un poco

-¿ya conoces todo el vecindario?- poniendo el agua en la pava

- no mucho ya que la mudanza me tomó más tiempo de lo esperado además las cosas de mi estudio tardaron en llegar- se levanta acercándose a mi

-¿tienes un estudio?- curiosa

- si soy pintora, hago cuadros, alguna que otra escultura de cerámica

- yo soy pésima dibujando ni una mariposa se hacerla bien- preparando el café

Causando que ria de mi comentario le doy su taza de café lo cual agarra, mi celular empieza a sonar así que rápidamente dejo mi taza en la mesa para ir a agarrar mi celular que está sobre mi cama, lo tomo pero no es el sino un mensaje del trabajo que mañana tengo que ir una hora más temprano, me doy vuelta encontrandomela en la puerta asustándome un poco

-¿pasó algo? Es que corriste y pensé que era algo importante

-no nada- suspiré

Dejo el celular sobre la cama de nuevo, ella ve mi decepción en mi rostro

-¿esperabas algún mensaje?

- si- caminando a la cocina- en realidad no- tomando mi taza- no lo se

Mi teléfono del comedor suena

-perdon voy a atender

-no hay problema ve- dice sonriendo

Atiendo la llamada, es el conserje del edificio avisando que mi pedido que había hecho la semana pasada ya está en la puerta del edificio pero necesitan mi firma

-ahora bajo- cuelgo la llamada

Veo que viene caminando tomando su café

-tengo que bajar dos minutos ¿no te molestaría que te deje sola?

-ve no hay problema

-¿gracias?- hasta ahora no le pregunte el nombre pero parece que ella se da cuenta

- Billie

Salgo del apartamento, Billie se queda observando el lugar cuando el teléfono de nuevo empieza a sonar, mira seriamente a la dirección del cuarto se asegura que se haya ido por el pasillo cuando ve que no hay nadie, camina al cuarto tomando el teléfono

-asi que eres tu- dice mirando la pantalla del celular

Toma un profundo respiro y atiende

-buenas noches- dice sentándose en la cama mirando las fotografías que hay sobre la mesa de luz

-¿quién habla?

- la dueña de este telefono

parandose para ir al closet viendo la ropa

-¿ en qué puedo ayudarlo?

-disculpe es que quiero contactar con alguien pero me equivoqué de número

- usted debe ser el ex de la antigua dueña de la línea telefónica ya que me dijo que si llamaba alguien preguntando por ella avise que no tiene más este número enserio lamento decirte que no soy ella y que este es mi número ahora lo que pediría que no llames mas- cuelgo la llamada

Billie escucha como la puerta se cierra así que volvió justo a tiempo deja el teléfono sobre la cama volviendo a la sala

-fui al baño espero que no te moleste- inocentemente

- no hay problema

Dejo la caja sobre la mesada de la cocina

-no seré una pintura pero soy gran lectora de novelas fransesas- sacando los libros de la caja

Ella toma una abriendolo viendo que en todas las páginas las palabras esta en francés

-de seguro sabes el idioma- sin entender

Me río de ver su cara de confundida al tratar de entender

-tengo una madre francesa la cual me crió hablando su idioma natal ya que ella solo habla francés

- me gustaría aprender

- yo te puedo enseñar algunas palabras pero si tu me muestras algunas de tus pinturas jamás tuvimos una vecina artista

-cuando quieras ven a mi apartamento y te muestro

Nos quedamos viendo por unos segundos, algo me está pareciendo interesante en ella

-se que soy nueva aquí pero podemos ser amigas vivimos una al frente de la otra

-claro que podemos ser amigas- dije sonriendo

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