La llave de tu corazón [Omegaverse Camus x Mu]

Capítulo 2

A la mañana siguiente Kardia le escribió una carta a Dohko comentándole del asunto de reunir a sus retoños, quien gustosamente acepto sin vacilar y respondió la epístola con las siguientes palabras.

Por nosotros no hay problema alguno es más si quieres podemos ir a visitarlos hoy por la tarde; que mejor que comiencen a tomarse afecto desde niños para asegurar su futura unión.

En cuanto el Alfa mayor de la familia Braunschweig recibió la noticia avisó lo más rápido posible a su familia y a la servidumbre que se prepararán para la llegada de los Lüneburg, Camus al escuchar a su padre se puso más nervioso de lo que ya estaba la noche anterior.

Camus: ¿Papá es necesario que conviva con Mu?

Kardia: Claro que lo es y no pongas esa cara de fastidio, ¿Te quedó entendido?

Camus: Si

Kardia: Anda y ve con tu madre para que te arregles

Sin muchos ánimos Camus se dirigió a la recamara de Dégel, ahí pasó la mayor parte de la mañana probando diferentes atuendos para la merienda de esa tarde. Al salir no podía verse más ridículo según el pero a los ojos de sus padres era el niño más adorable que podía existir.

Al cabo de unas horas los condes arribaron a la residencia Braunschweig, todo era tranquilidad para Camus hasta que lo dejaron cuidando un rato al bebé omega.

Shion: Dégel dime que te hiciste en el cabello, se ve bastante sedoso y brilloso

Dégel: Ven te lo mostraré ¿Cam querido puedes vigilar unos minutos a Mu?

Shion: No como crees, mejor te espero aquí o me lo puedes mostrar en otro momento.

Dégel: No te preocupes por ellos y vamos, Cam cuida bien de Mu

Mu: -Abriendo sus ojitos- Mmmm

Camus: Por favor no te despiertes –tratando de cerrar los párpados de Mu-

Mu: Mmmm –toma los dedos de Camus- ggugg

Camus: Porque siempre yo –zafándose del agarre de Mu-

Mu: jjiji

Camus: Suéltame que no soy sonaja *Espero que vuelvan pronto porque ya me harté*

Al fin de 10 tortuosos minutos aparecieron de nuevo su tío y Madre que contemplaban con ternura aquel acto sin embargo para Camus eso no implicaba ser tierno, solo actuaba para complacer a los adultos presentes.

ℭ𝔬𝔫𝔱𝔦𝔫𝔲𝔞𝔯𝔞́...​