Ghell: Sobrevive hasta el amanecer

PROLOGO

"Y ahí la vi, solitaria... Mirándome con esos ojos marrones que destilan frialdad y miedo... Era literalmente mirar al infierno en sus ojos"

-Que lees?- le pregunto, invadiendo su espacio personal. Ella levanta la mirada haciéndome ver ese brillo en sus ojos que nunca olvidaré

-Es una novela, los chicos como tú no la entenderían- dijo ella, con esa expresión de arrogancia y esa voz tan suave pero con el tono perfecto para atravesar el corazón del hombre más duro del mundo

-Estás muy segura?- le dije haciendo una sonrisa pícara y mirándola fijamente. -Porqué no creo que estés tan segura de eso- dije quitándole el libro de las manos que para mi sorpresa no puso resistencia alguna, pero sentí como esos hermosos ojos parecían maldecir mi existencia.

-Es encerio?!- pregunté viendo el título y la portada del libro sorprendido

-Sí- dijo ella, con un tono cortante... Era obvio que se había molestado. -Porqué la pregunta?- Continuo ella con esa mirada de molestia pero ahora tenía ese toque de curiosidad.

-Porque esta novela es mi favorita- dije con una voz de vergüenza y sorpresa a la vez... No había despegado los ojos de los de ella así que pude ver esa reacción de sorpresa e intriga en su rostro.

-Y que hace un chico como tú leyendo novelas cómo está?- me cuestiono tirandome una mueca burlona y provocativa a la vez. -No será que te gustan los chicos?- dijo ella mientras se le escapaba una carcajada.

Sonreí amablemente para poner una expresión seria de golpe en mi rostro. Ella al verla dejo de reír y vi ese pequeño miedo en sus ojos al verme asi... Logré mi cometido. Me acerqué lo suficiente a ella hasta que nuestras respiraciones se mezclaron levemente... Sin perder sus ojos de vista le susurré algo de la forma más sutil pero demoníaca posible... Viendo como sus ojos ahora me miraban con curiosidad y altanería... Ella quería conocerme.

-No somos tan diferentes- dijo ella con esa voz tan melodiosamente diabólica -Tambien amo destruir!-

"Cuando no estoy destruyendo al mundo... Estoy leyendo y llenándome de conocimiento"

Mi rostro hizo una sonrisa de lado dejando ver un oyuelo en ese lado de la cara... Le devolví el libro y me paré derecho cruzando mis brazos en mi pecho, viendo como ella tenía las mejillas sutilmente rojas

-Eres el diablo- le dije a ella mirándola fijamente a los ojos...

-Eso me dicen algunos- dijo ella haciendo una mueca de dolor fingido... -El diablo no es comparado conmigo- dijo ella mirándome a los ojos de la manera más fría posible... -Yo soy todo el infierno- añadió con esa sonrisa torcida en sus labios...