Cómo Debió Ser El Final Y Como Continuo

Capitulo 3: el encuentro con Catalina y Julieta

Lucia y mirco siguieron el camino a la casa de Catalina, aunque a medida que caminaban Lucia se ponía más y más nerviosa, hasta el punto que pareció que estaba a punto de tener un ataque de ansiedad

- espera mirco, no puedo más - dijo Lucia cogiendose el pecho y poniéndose de cunclillas.

- porque!? lucia, que pasa?, Te sientes mal? - le pregunto preocupado a Lucia mientras se ponía a su altura.

- ah, pues es que estoy realmente novedosa (nerviosa), y siento espera el pecho - dijo enredando aún más las palabras de lo normal

- aunque no te entendí muy bien, deduzco que estás nerviosa - le dijo mirco, a lo que Lucia solo asintió fuertemente, mirco sonrió, se acercó y la beso - y ahora como estás? -

Lucia sonrió y volvió a besar a mirco - si ahora estoy mucho mejor, pero solo por si causa (acaso) solo por si causo (acaso), no vayas a soltar mi mano en ningún momento si? -

- nunca - afirmó mirco - además ya llegamos a mi casa, es la que está terminado la cuadra -

Ante estas palabras Lucia abrió a un más los ojos y apretó la mano de mirco

- tranquila, todo va a estas bien - diciendo esto se levantó y guío a Lucia por lo que quedaba de camino.

Cuando llegaron a la puerta, mirco entro directamente, - ¡mamá ya llegamos! -

Dijo mirco caminando hasta la mitad de la sala, poniendo a Lucia a su lado al ver que prácticamente estaba escondida detrás de el.

- mi cuagulito, no te estaba esperando - dijo Catalina saliendo de los cuartos del fondo - que está haciendo ella aquí - dijo Catalina frunciendo el seño.

- ay mamá no empieces -

- pero tú me habías dicho que no la ibas a morder, así que mi cuagulito, que paso? - pregunto Catalina viendo a mirco directamente a los ojos para poder leerle los pensamientos, y después pasando a ver a Lucia. - así que eso fue lo que pasó -

Lucia aparto la mirada de la de Catalina y se encogió en su lugar, a lo que está volvió su mirada a la de mirco

- ay ya mirco, no la estoy intimidado, es más me encanta, ya te había dicho que me agradaba la última vez que nos reunimos, así que deja de mirarme así - dijo Catalina abriendo los ojos hacia mirco, que no sé esforzó por reprimir el asombro al igual que Lucia - ay querida, ven aqui - dijo Catalina, mientras se acercaba a abrazarla. - te extrane tanto, tenemos tanto de que hablar, tienes que contarme todo lo que ha pasado y como te convirtió, ven siéntate , voy a traer unas bebidas -  después de su monólogo se fue caminando para preparar los batidos de sangre.

- que está pasando aquí? - dijo mirco anonadado

- pues parece que todavía le caigo bien a tu mamá -

- eso es lo que me sorprende, no creí que fuera real lo que decía en ese entonces, a veces dice las cosas solo para complacerme -

- fantabulosisimo, parece que realmente seremos muy buenas amigas -

Concluyeron está conversación mientras se sentaban en el sofá, con mirco con cara de confundido, y Lucia acariciándole el cabello para tranquilizarlo mientras que aclaraba sus pensamientos, en eso entra Catalina con los vasos de licuado.

- ay por favor mirco deja el drama, estás tan confundido que ni siquiera puedo leerte el pensamiento - dijo Catalina exasperada de su hijo, y cambiando por completo de semblante se dirigió a Lucia - mira querida, aquí está tu licuado, dime si te gusta o si te apetece algo más -

- no tranquila, llevo muy poco de ver vampiro por lo que no sé, si cierto (quiero) o se me antoja algo, así que tranquila -

- eres un amor, bueno cambiando de tema cuéntame cómo ocurrió todo, y no olvides nada -

Cambiando a una posición más cómoda, Lucia empezó a contarle todo lo que había pasado, mientras mirco solo observaba todo callado.

Al cabo de un rato de que Catalina y Lucia estaban hablando llegó Julieta y se unió a la charla y celebración,  después de un rato mas Lucia y mirco volvieron a salir de la casa para poder caminar, despejarse y charlar un poco.

- bueno, parece que todo salió fantabulosisimo - dijo Lucia mientras miraba a mirco

- si sorprendentemente todo se soluciono fácilmente, no me esperaba que no dijera nada -

- cómo así, esperabas que me gitana? -

- gritara, y no, no es eso, es que esperaba que se opusiera un poco, para que tuviera que defenderte o algo, pero no hubo necesidad de nada , se llevaron bien desde el inicio, siempre te haces querer dónde quiera que llegas -

- jajajajajaja eso es cintos (cierto), tal vez ese es mi poder -

- no creo que que ese sea el caso, es más posible que todos queden prendados de tu belleza y buena personalidad -

Lucia lo miro crédula, dado que ante sus propios ojos ella no era particularmente hermosa o algo así, por lo que le costaba creerlo, en eso llegaron al vampibar, dónde entraron y mirco pidió un par de tragos.

- ay mirco, yo creo que te contundes (confundes), después de todo tu no eres imparcial, ya que me amas -

En ese momento llegaron las bebidas, distrayendo a Lucia de la conversación, dado que se dentro en probar el trago que mirco le había pedido, que al notar lo rico que estaba le dio otro trago y le sonrió se manera dulce y alegre a mirco y volvió a concentrarse en la bebida.

Sin embargo mirco, se sorprendió de lo que dijo Lucia dado, que el siempre era capturado por su belleza, y había notado que en ocasiones incluso atraía las miradas de otros chicos.

En ese momento a mirco le entró una llamada, por lo que le dijo a Lucia que podía tomarse el de el, y salió del bar para poder contestar.

Mientras tanto Lucia se tomó el trago que le cedió mirco, mientras observaba como era el bar y como actuaban los demás vampiros, en ese momento le pusieron una copa enfrente, a lo que ella miró el origen de esta.

- la casa invita - le dijo el bartender, que le sonreía con coquetería, sin embargo ella no se dió ni cuenta.

- bueno, muchísimas gracias, soy nueva aquí, y no se bien que pedir - le respondió Lucia a lo que el bartender le sonrió y se inclino sobre la barra

- y quieres que te enseñe todo lo que puedes hacer -

Mirco que terminó su llamada he iba entrando, cuando el bartender se inclinó y se le insinuó a Lucia, sintió como le hervía la sangre, por lo que se acercó rápidamente cogiendo al tipo por el cuello de la camisa mostrándole los colmillos y los ojos rojos.

- ni se te ocurra acercarte a ella, ella es mi novia - dijo para después soltarle y agarrar a Lucia de la mano y para hacerla pararse y besarla apasionadamente, dejando en claro para todos los que la estuvieran mirando que ella estaba con el.

- ay mirco, déjame darte (decirte), lo celoso que eres - le dijo Lucia a mirco mientras le sonreía y lo abrazaba por la cintura, volviendolo a besar, le dijo - no importa si alguien se me interpone (insinúa), yo siempre te voy a amar a ti -

- yo igual - dijo mirco para volver a besarla.