Han pasado cinco años, desde que estoy aquí, en este hospital, nunca he tenido a nadie, antes de terminar en esta silla, solía jugar en mi orfanato, ahora solo puedo ver desde mi balcón como los niños del hospital juegan, mientras yo me quedo atrapada en mi cuerpo, pero no todo es tan malo, por las noches, veo una hermosa luna, siempre hablo con ella, le cuento como me fue con rehabilitación, como me siento, creo que somos iguales, pues, cada vez que la veo, está sola, sin ninguna estrella alrededor, ya hace mucho de mi accidente pero ya me darán de alta, eso me asusta, pues una nueva vida, una vida que no se que me depare, cuando le conté a mi a la luna, algo raro pasó, apareció una luz cegadora, cuando logre abrir mis ojos, logré ver que estaba en otro lugar, parecía de noche pero desde mi lugar vi una ciudad brillante, a mi lado, se encontraba una hermosa mujer, de tez pálida, cabello platinado, con unos luceros de un color violeta y un vestido que llegaba a sus tobillos, se presentó como la luna, dijo que era una amiga y que me mostraría su hogar, yo no entendía pues aunque fuera la luna y mi "amiga" por que me había traído era algo que sin duda necesitaba saber, me mostró una enorme ciudad llena de luz, pero sin nadie viviendo ahí, todo estaba solo, sin gente, sin vida, la detuve y le pregunte,-¿ Por que me trajiste aquí? - ella no respondió al instante, pero después de unos minutos me dijo - Estoy sola y no quiero que te vallas, sin ti tendré una nueva vida y tengo miedo - me sorprendí.
Era como yo, pero le conteste - ¿De que tienes miedo? - y ella lo cambio todo con una frase, - Tengo miedo a estar Sola, no tengo a nadie y si tu te vas, estaré sola otra vez - mire a lo lejos y vi varias estrellas, le comente, - ¿ Que tal si vamos con las estrellas? - ella me miro y dijo - No, que tal si no les agradamos y si nos temen - ¡PARA! - interrumpí - si seguimos asi nunca saldremos, solo tenemos que dar el primer paso - en ese momento tome su mano y saltamos directamente a las estrellas, eran tan pequeñas, parecían unas niñas, cuando nos vieron, unas cuantas se asustaron, pero después de presentarnos, todas nos abrazaron y logre ver la sonrisa de luna, creo que dentro de mi sabia que estaría bien, ella me voltio a ver y se acerco diciendo - Creo que es hora de irse - ¿De que hablas? - conteste - Ya es hora, amiga mía, ya es hora de que tu des el primer paso - cuando termino de decir eso, desperté, al parecer me había quedado dormida en mi silla, justo en el balcón, entre a mi habitación y en mi mente resonaron las palabras de luna - YA ES HORA DE DAR EL PRIMER PASO - en ese momento hice algo que desde hace mucho tiempo tuve que hacer, me levante de mi silla de ruedas, que ya no necesitaba, aun que ya podía caminar no lo aceptaba y siempre me quedaba sentada, pero ya no mas, era el momento, el de seguir adelante, que aun que tenia miedo, sabia que era lo mejor y así inicie mi nueva vida, pero desde esa noche veo que algo cambio, ahora la luna no esta sola, sino que esta llena de estrellas y yo ahora trabajo como ayudante en el orfanato, tengo grandes amigos, un buen esposo y en general tengo una Feliz vida, tal vez, todo fue cuestión de........Dar el primer paso.