Final Feliz (Cooking Companions y tu)

3. Rutina en compañía

Te despertaste con un sentimiento extraño. Al abrir tus ojos te encontraste con el techo de madera que de tanto verlo todos los días cuando te dormías y despertabas ya sabias cuales eran sus patrones.

Miraste la ventana, fijándote que el alba apenas estaba comenzando a asomarse. Te preguntaste a ti mismo/a del porque tu subconsciente te habrá despertando a esta hora, pero casi al instante recordaste todo lo ocurrido del día anterior

Te incorporaste de un brinco, a tu cerebro le estaba costando un poco asimilar todo lo ocurrido ayer. Estabas teniendo una de esas situaciones en las que no sabias si tus recuerdos eran producidos por un sueño o realmente si ocurrieron.

Un sentimiento de temor y desolación se hizo presente; temías que realmente todo lo pasado sea a causa de las imaginaciones de tu mente.

No obstante, escuchaste unas cuantas voces que provenían del piso de abajo, por lo cual te levantaste de la cama y saliste con gran prisa de tu habitación.

Diste un suspiro de alivio cuando bajaste completamente las escaleras. Allí pudiste ver al grupo de jóvenes quienes hablaban entre ellos con un tono no muy animado que digamos, pero aún así te sentiste muy contento/a de que tu miedo solo haya sido una falsa alarma.

Te acércate con cuidado al grupo, esperando no haber aparecido en un mal momento, no obstante, al estos notar tu presencia te observaron tranquilos y por lo menos Gregor, Anatoly y Mariah te dedicaron una sonrisa, ya que Karin tenía una expresión de pocos amigos.

—Buenos días, (TN) ¿Dormiste bien? —Hablo primero Anatoly.

—Si, dormí muy bien. ¿Y ustedes? ¿Por qué están despiertos tan temprano? ¿Hubo algún problema?

—Ah no, en realidad, dormir en el sofá me pareció más cómodo de lo que esperaba —Dijo Mariah con una sonrisa.

—Y la razón por la que estamos despiertos tan temprano es porque Gregor decidió armar un escándalo —Dijo Karin con un semblante molesto.

—Venga Karin, hay que aprovechar la luz natural antes de que se haga de noche —Se excuso el mayor dejando escapar una pequeña risa.

Sabias que mantener una cabaña a flote no era trabajo fácil, las tareas siempre eran muchas y a veces el día no daba abasto para terminarlas todas, pero a pesar de eso; admitías que Gregor estaba exagerando un poco.

Ni siquiera oías el canto de los pájaros mañaneros. Pero bueno, era claro que no podías enojarte con el gran hombre.

—Bueno, ya que estamos despiertos, ¿Por que no ayudamos con algo en la cabaña? —Propuso Mariah.

Gregor y Anatoly se mostraron positivos ante la propuesta de la chica, sin embargo, Karin por otro lado se mostraba disgustada; aun así no opuso ninguna queja y solo se limito a suspirar.

—Ya que todos estamos dispuestos. (TN) ¿Cuáles son las tareas que tienes para hoy? — Pregunto Anatoly, el resto te miro expectante.

—Creo que antes deberíamos desayunar algo, ¿No creen? 

Los cuatro se sorprendieron ante lo que dijiste y entre ellos se miraron como si trataran de decirse algo.

—No hay necesidad de que nosotros desayunemos, con que solo comamos la cena es suficiente —Hablo el mayor de ellos a la vez que se rascaba la cabeza con cierto nerviosismo.

Los demás solo se quedaron callados y apartaron sus miradas, podías sentir un aura decaída en cada una de ellos.

Ciertamente te pareció extraño lo dicho por Gregor, supusiste que algo tenia que ver de donde venían o por lo que habían pasado, pero decidiste que ahora no era el momento de indagar en pasados ajenos.