El picaporte giró con lentitud y el rechinar de la puerta oxidada y pesada produjo un perturbador ruido que estremeció la habitación. Por el umbral de aquella puerta se hizo presente la figura alta y esbelta de aquel hombre que era responsable del cambio tan abrupto de su vida, había observado su rostro solo un par de veces desde que se presentó ante él en el gran salón del trono de su padre y su expresión permaneció inexpresiva desde entonces, tan solo una fina línea se formaba en sus labios cuando lo veía entrar en cada evento, reunión del consejo o algún estúpido baile al que estaban obligados a asistir. No estaba seguro de qué debería decirle, finalmente sus indeseables pesadillas se habían vuelto una realidad inevitable, la pérdida de su libertad, lo asumió como un hecho en cuanto lo vio caminar hacia su padre solo con la única intención de pedir la mano del futuro heredero.
Y ahora estaban ahí, en la pulcra y espaciosa habitación del único hijo y lord de la casa Potter, mirándose fijamente y sin emitir ni un sonido. Él le dijo que le esperara en su alcoba, él le dijo que cerrara la puerta y que cenara lo que sus sirvientes les habían preparado. Se rehusó a probar un bocado y solamente se limitó a esperarlo sentado en la mullida cama de plumas de cisne que estaba en medio del cuarto, mientras removía sus manos para calmar la ansiedad que le provocaba la espera, ya que debía cumplir su papel como se le ordenó, debía ser buen esposo y acatar los deseos de su marido, pero ¡maldición! él era un Malfoy y sobre todo el príncipe de su casa destinado a gobernar, no se sentía preparado para el peso que habían depositado en él.
Harry Potter lo observó en un inquietante silencio, no podía ver su mirada con claridad, ya que la luz que se filtraba por la puerta no se lo permitía, solo pudo apreciar su figura imponente cerrar la puerta en un golpe seco y la habitación volvió a la oscuridad, que fue momentánea, pues después de escuchar sus pesados pasos recorrer la habitación, sin llegar a acercarse a él, se detuvieron por unos instantes y escuchó claramente como encendía unas velas para iluminar la habitación con su cálido resplandor.
Entrecerró los ojos con molestia, pasó demasiado tiempo sentado en medio de la oscuridad y la luz le resultó insidiosa.
—No he escuchado tu voz ni una vez en toda la noche. —señaló cruzando sus brazos contra su pecho y apoyándose en la mesa que estaba detrás de él, recorriéndolo con su mirada sin ninguna doble intención, como si solo buscara conversar trivialmente.
Draco esbozó una sonrisa sardónica.
—Mis disculpas, mi lord, solo no tengo nada que decir. —dijo con tono condescendiente, cosa que el moreno notó, pero no pareció querer corregirlo.
—Es normal que estés abrumado en tu noche de bodas, sólo me gustaría saber cómo puedo hacerte sentir cómodo. —comentó con ligereza y su mirada se tornó misteriosa, Draco cruzó sus piernas revelando un poco de su desnudez sobre la fina bata de seda plateada que le llevaron sus sirvientes un rato atrás, pero se sorprendió de no percibir interés alguno en el lord de las tierras de Gryffindor.
Desvió sus ojos recelosos.
—No estoy abrumado, soy perfectamente consciente de mis obligaciones para con mi pueblo. —replicó frunciendo el entrecejo, no quería hacerle saber lo asustado que se sentía por dentro, hace un mes que Harry Potter se presentó ante su padre y que pidió su mano, ni siquiera sabía exactamente por qué debía ser él, por qué lo escogió de entre todas sus opciones. —Mi lord...—agregó de mala gana, recordando sus modales.
—Sé que quieres ayudar a Slytherin a crecer otra vez con esta unión, por eso tu padre aceptó mi propuesta, —suspiró cansado, el otro chico le envió una mal disimulada cara repleta de reproche y él tan solo se quitó su capa de color vino que poseía bordados dorados en honor a los colores de su reino, y la echó a su costado sobre una silla, —Quiero que me tutees, ¿puedes hacerlo? Soy tu esposo ahora y sé que detestas dirigirte así hacia mí.
ESTÁS LEYENDO
Lord Potter-One shot
FanfictionDraco Malfoy se encuentra en la alcoba del Lord de la casa Potter esperando pasar la peor noche de su vida. Cuan equivocado puede estar al pensar que será una horrible noche de bodas, porque el seductor Harry Potter solo desea que se entregue a él...