Capitulo 4

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"Si tu sabes lo que vales, ve y consigue lo que mereces. Pero tendrás que aguantar los golpes"


-¡No la deje entrar! –Grito el Castaño atras. James.

- Sí profesora, no la deje entrar. Llega tarde–Pronuncio Holly.

Yo solo los observaba desde la puerta del salón. Sus burlas y yo ahí parada observando como una idiota.

-Lo siento señorita Brown, no puede pasar –Dijo al fin la profesora. Asentí, me di la vuelta y al alejarme se comenzaron a escuchar risas. Se estaban burlando.

Fui al campus, ahorita estaría vacio ya que aun era algo temprano y todos se encontraban en clases.


A veces es irónico que te guste la persona que este entre esas personas que te hunden. Te humillen. 


*


Iba caminando rápido por el pasillo con libros en manos, era la cuarta clase y ya llevaba 10 minutos de retraso. 

Un chico paso corriendo ocasionando que callera y mis libros botaran a lo lejos. Mierda; pensé.

Me puse a recoger mis libros rápido.


-Oye tarada, ¿esto es tuyo? –Mi vista la volví al chico que me hablaba con un libro mío en mano. Era James.

- Sí –Lo tome rápido. Me paré con los otros dos que ya había levantado.

- ¿Qué es? ¿Pornografía? –Dijo burlón. Los de alrededor comenzaron a reír.

- Es... es... geografía –Articule titubeando

- ¿Qué? No te escuche tarada –Seguía con su tono de burla y los demás reían.

Parpadee varias veces entendiendo que este chico se estaba burlando de mí. ¿Cómo puede gustarme?

Acomode bien mis libros y seguí mi camino sin decir más.


Llegue a la clase más tarde de lo normal. Le estuve rogando al profesor para que me dejase entrar hasta que accedió.


Terminaron las clases y regrese a casa cansada. Abrumada de tantas burlas, triste. Hoy en día no había visto a Ashley.


Llegue a mi casa, abrí ya que suponía que no abría nadie. Mi mama llega tarde y mi papá igual.

Tire mi bolso por un lado y fui por un vaso de agua. Mi vida era aburría, era pura mierda. 

Deje el vaso en el fregadero y subí a mi habitación en busca de un cúter.

Estaba por pasar esa cosa por mi muñeca cuando tocaron el timbre. Metí rápido eso en la caja y la guarde debajo de mi cama.

Baje rápido para ir a atender y era Ashley.

-¿Fuiste a la escuela? –Pregunte mientras la hacía pasar a la casa.

- No, tuve que ir al dentista –Hizo una mueca

- Oh, ¿Y qué pasa? –Pregunte. Ya que cuando ella viene a mi casa es para decir algo o para que salgamos.

- Hoy hay fiesta en casa de mi novio –Dijo esta. ¿Novio? Rogué para mis adentros que no fuera James.

- ¿Novio? –Pregunte

- Sí, ¡James me pidió que fuera su novia! –Dijo emocionada.

Sentí como una puñalada al corazón. Suene patético, pero sentí feo.

-Que bien –Dije normal

- ¿Iras? –pregunto sonriente. Negué.- ¿Por qué? Deberías salir y dejar de pasártela en internet

- Es mejor, que el alcohol y fumar –respondí

- Ay, anda vamos. Así conoces a sus amigos –Dijo picarona.

¿A caso Ashley no tiene alguna idea de cuánto odio a sus amigos? Son los que me hacen la vida imposible. Sin contar al moreno que me gusta mucho.

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