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Iván estaba en el puesto de copiloto del auto de su mejor amigo, Rodrigo Carrera. También famoso streamer de la plataforma de Twitch.
El castaño tenía la vista puesta en el volante, algunas veces miraba de reojo a Iván o hablaba de algo con él, pero este estaba aún mal con lo ocurrido la noche anterior, se había dormido más tarde de lo usual, y temía que el chico castaño notara su comportamiento.
- Ivi... ¿estás bien? – Pregunto carrera sin despegar la mirada del autopista – te noto un poco inquieto desde que salimos...
- no sé, quizás porque soy tu amigo y me preocupa tu bienestar.
- estoy bien, no te preocupes. ¿Cuánto falta? Siento que ha sido el viaje más largo a un supermercado.
Y justo cuando dije eso, Rodrigo se estaciono.
- ya llegamos, pelotudito.
Me tiro una bolsa para hacer compras, mientras apagaba el auto y abría la puerta para bajarse.
- ¿quiere que le abra la puerta, esposa mía?
- chúpame la pija, Rodrigo. – Iván abrió la puerta con un toque de malhumor.
...
Rodrigo había ido por unas papas, mientras el pelinegro caminaba por algunos pasillos, viendo que podría comprar para llevar a su casa.
Había entrado al pasillo de aseo o uso personal, y siguió ojeando, hasta que un producto llamo su atención.
Era un envase de color rojo, igual al que el chico enmascarado usaba, en el empaque decía "Lubricante con olor y sabor a frutos rojos" Iván sintió sus mejillas arder.
- ¿vas a comprar un lubricante?
Iván dio un pequeño grito, mientras saltaba en su puesto, dejando caer el envase, dándose la vuelta rápidamente para ver a su acompañante, el cual tenia una mirada algo picara y burlona
- ¿u-un qué? Pft, ¿Qué mierda dices, Carrera? – Iván recogió el envase del suelo y lo volvió a poner donde estaba – pensé que era un shampoo o algo así. ¿Por qué mierda hay algo así en un supermercado? – se excusó con un notorio nerviosismo.
Rodrigo lo miraba con una expresión de "¿es enserio, spreen?"
- Mira que voy a creerte. Allí mismo dice "Lubricante" en letras grandes, ¿Cómo vas a confundirlo con un shampoo? – señalo el tarrito
- s-sabes que, ya es tarde, y hiciste muchas compras, iré a hacer la cola antes de que se haga más larga.
Y patitas pa q las tengo, Iván salió huyendo del lugar, dejando a un carrera algo perdido.
...
Habían terminado las compras, y ya se encontraban en el auto. Iban a parar en un lugar para almorzar, ya que eran las 12 de la tarde.
El tema del lubricante no se volvió a tocar, y quedo en el olvido. Puesto que Rodrigo era bastante bueno en encontrar cualquier babosada de que hablar.
Habían llegado al lugar donde íbamos a almorzar, y pillaron una mesa que estaba fuera del local.
Una mesera se acercó y hicieron sus pedidos, para que luego esta se retirara, dejando solo a Iván con Rodrigo, el cual no le quitaba la mirada de encima, el solo la evito.
- Ivi, enserio no estás bien, estas inquieto desde que salimos de tu casa, y luego paso lo del lubricante... es que acaso... - Rodrigo puso una mano en su barbilla, pensativo. Iván estaba sudando, mientras sus dedos se cruzaban desesperadamente debajo de la mesa.
Rodrigo alzo la mirada sorprendido, como si lo hubiera descubierto, sentía que moriría si daba en el clavo.
- es que acaso... ¿ves porno? – La cara de Iván cambio de nerviosismo a un total "que"- ya sabes, en pronhub. No me extrañaría el por qué el lubricante, tal vez querías mas facilidad al jalártela.
Hizo una "representación" con su mano, como si estuviera jalando una pija invisible, seguido de una escandalosa risa. Iván tenía la cara rojísima, fácilmente lo confundirían con un tomate.
- ¿y que tiene que lo haga? ¿Tu no lo haces? – se defendió Iván, enojado.
- JAJA. No, Ivi. No hay nada de malo. Yo lo hago de vez en cuando, ¿Qué hombre no hace eso? – Rodrigo se cruzó de piernas
Si, no tenia nada de malo, si tan solo Iván no mirara a un chico que se mete de cuanto objeto en el culo.
La mesera llego con sus pedidos, dejándolos en la mesa, Ambos dejaron de hablar para disponerse a comer, aunque aveces Rodrigo le dedicaba unas miraditas a Iván.
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