II : Hoy en día

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-¿Así que realmente no se arrepiente? ¿De verdad no siente nada al ver matado a su padre?

-Le he dicho mil veces que no.

-Bien entonces no tenemos ningún motivo para dejarte ir aún. Gracias.- El abogado salía por la puerta, parecía molesto pero no podía mentir, realmente no estaba arrepentido.

25 de septiembre 2007

Han pasado 5 años desde aquella vez que maté a mi padre, durante las investigaciones nunca mostré ninguna muestra de arrepentimiento alguno, eso llevó a que mi madre me internara en un hospital psiquiátrico.

El inició de una nueva historia.

Pastillas, laxantes, calmantes eran mis 3 comidas diarias; la gente pensaba que estaba loco, cuando la noticia salió a la luz, todos realmente pensaban que era un psicópata, o ¿porque lo hice enfrente de un niño?¿cómo es posible que un joven cometiera tal asesinato?

Eran las palabras que todos los días escuchaba, ¿acaso ellos sabían por todo lo que pasé por culpa de el? Claro que no. Solo quieren morbo y más morbo más no saben el otro lado de la historia.

El día estaba tranquilo, nos encontrábamos en el patio del hospital era la misma interminable rutina de salir a despejarte un poco de las paredes blancas; en el hospital pude encontrar muchas historias más retorcidas que la mía, también hice algunos amigos, entre ellos el señor Kim y Ruy, el señor Kim es un anciano con demencia que dejaron internado hace unos años, la demencia no es una enfermedad mental grave pero sus hijos eran unos hijos de puta y no querían pagar un asilo: Ruy era diferente tuvo varios intentos de suicidio en el pasado y su familia la interno para ayudarla.

El señor kim era muy sabio como chismoso, solía tejer y dibujar, era como uno de sus pasatiempos. Y Ruy amaba cantar era su mayor talento, todos disfrutamos escucharla en las fiestas festivas o cuando ocurre algún evento importante.

-Escuché que un nuevo plantel de doctores vendrá.- Comentó el señor Kim tejiamos las bufandas de invierno cuando el señor kim lo dijo.

Hace mucho que no venían nuevos doctores
-Es una gran noticia nos salvaremos de los fideos fríos jajaja.- intentaba forzar una sonrisa porque realmente la noticia era mala, cuando hay un cambio en los doctores la mayoría son novatos y nos tratan como niños de jardín, pero no quita la sorpresa al ver nuestros expedientes.

-¿Y cuando llegan?- Preguntó Ruy que seguía con su batalla contra el estambre.

-Supongo que llegaran mañana, espero que estos no sean novatos como los de la última vez.

Y vaya que no eran novatos.

A la mañana del dia siguiente nos pidieron ir a la sala principal a recibir a los nuevos doctores, cuando entraron al lugar todos notamos sus auras y miradas, eran totalmente  frías sin ningún tipo de expresión o mueca a comparación de los novatos que llegaban con caras sonrientes y frases de maestra de preescolar, ellos eran diferentes y eso asustó a la mayoría en el lugar, pero había alguien en especial que llamo mi atención por completo... Vestía al igual que todos una bata blanca, unos lentes negros y su cabello se encontraba de lado, su mirada la tenía fija en algún punto, parecía demasiado concentrado, mi mirada solo estaba puesta en él, sentía que lo conocía de algún lado...

-Bien señoras y señores les presento a sus nuevos doctores, espero que los reciban con los brazos abiertos, a partir de hoy ellos se harán cargo de ustedes.-

La directora del hospital anunció mientras estaba a lado de ellos, todos saludaron y continuamente se presentaron; no le presté atención al nombre de la mayoría de ellos, solo esperaba el de...

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