e p i l o g u e

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—Adiós Felix hyung, adiós JiSung —se despidió SeungMin de su amigo y del chico que hace poco había entrado a trabajar luego de que se EunBi fuese despedida. JiSung era un tierno chico con cara de ardilla y cabello negro y largo que era un poco menor que él. Ambos se despidieron agitando sus manos, JiSung alarmándose porque casi se le caía la bandeja de su otra mano por andar algo distraído y aún no estar acostumbrado.

Se abrigó aún más si era posible, había nevado en Seul en la noche y él últimamente estaba algo enfermo y le picaba la garganta, por lo que se envolvió en la bufanda y sonrió cuando le llegó el mensaje de Chan que ya estaba esperándole afuera.

Un mes había pasado luego de esa tarde, podía jurar que el mes más feliz de su vida, no había día en donde no viese a Chan al menos por 5 minutos y el rubio siempre le recordaba de alguna u otra forma lo mucho que le amaba, lo feliz que le hacía y como hacía desaparecer todas las inseguridades que SeungMin sentía. Chan era simplemente tan perfecto con él, que SeungMin no podía sentirse más afortunado de tenerlo y poder tomar su manos sin miedo de nada, confiaba en él con los ojos cerrados y sabía que Chan también en él.

Se abrazó con fuerza al fornido cuerpo de su novio—que bien sonaba poder decir eso, tanto en su mente como públicamente, amaba decir que Chan era su novio todo el tiempo—, sintiendo como los brazos de este envolvían su cuerpo con fuerza y enterraba su nariz entre sus cabellos castaños. SeungMin suspiró gustoso, cerrando sus ojos y colocándose algo de puntitas para llegar más arriba y abrazarle mejor.

—Hola, mi Minnie —susurró Chan, separándose luego de un rato y tocándole la nariz con la punta de uno de sus dedos, para luego dejarle un suave y cariñoso beso corto en los labios helados en forma de saludo, SeungMin le sonrió contento. Hoy tendrían una pequeña cita antes de que Chan entrase a exámenes nuevamente y no puedan verse demasiado, pero antes de siquiera tomar su casco de motocicleta, Chan volvió a hablar—. Antes de todo, quiero hacer algo.

SeungMin le miró ladeando la cabeza, asintiendo. —Claro que si, ¿Qué cosa? —preguntó curioso, y frunció el ceño al ver a Chan apretando los labios y mirando al cielo nublado.

—EunBi quiere hablar contigo en persona —eso descolocó a SeungMin, confundiéndolo aún más y mirando a Chan pidiéndole alguna explicación—. No sé qué quiere decirte, me ha insistido toda la semana con que quiere hablar contigo. En todo caso le dije que si tú no querías, no iban a hablar, pero si quieres, nos está esperando en el campus —Chan se encogió de hombros con una mueca.

SeungMin se llevó un dedo a la boca, mirando a un costado y pensando por un par de segundos lo que le acababa de decir Chan. EunBi quería hablar con él, no sabe para qué, y tampoco sabe por qué recurrió a Chan para buscarle cuando podía hacerlo ella misma. Su curiosidad solo aumentó aún más, así que luego de aproximadamente un minuto, le asintió a Chan y se encogió de hombros.

—Está bien, vamos.

SeungMin aspiró algo nevioso al bajar de la motocicleta en el estacionamiento de la universidad de Chan y EunBi, sintiéndose como un niño pequeño cuando Chan le quitó el casco y besó sus labios castamente, sonrojándose un poco al ver a los alumnos que pasaban por allí mirarle con curiosidad. Sintió su mano ser tomada por la de su novio y le sonrió intentando mantener un poco la calma, antes de que este comenzara a jalarle suavemente por el estacionamiento hasta salir de este. La universidad era estatal, por lo que SeungMin podía entrar allí sin problemas si estaba acompañado de Chan.

Entrando a lo que SeungMin reconoció como el patio central que daba a la salida pública, se sintió observado por todos los que estaban allí, sabía que su novio era bastante popular allí, y que llegara tomando de la mano con un niño que no estudiaba allí obviamente que era extraño, pero Chan parecía ignorarlo y solo lo llevaba hasta la pequeña rubia sentada en una de las tantas bancas solitarias que SeungMin pudo reconocer.

for me | chanminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora