~~Bloody love~~

capítulo II

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— Estás bien? — todo era silencio hace unos minutos, hasta que escucho la pregunta de An quien se le acercó pues la había visto sentada sobre un pequeño muro en un lugar donde no transcurría mucha gente    — Emma te estoy hablando — la nombrada no respondió — ten bebé esto — extendió el brazo con una bebida en la mano — si, sigues asi morirás...oh Emma! Parece como si estuviera hablando sola — pensó por un momento — umm... Nittaya!

— No me llames así — respondió en forma de molestia, si lo sabía, si la llamaba así reaccionaría.

— Ok ok, lo siento, pero era la única forma en que me harías caso.

— Solo estaba pensando... — la interrumpió.

— Vamos, no lo hagas, no quiero preocuparme por ti, sabes cuánto me duele verte en ese estado y aún así lo haces — hizo un pequeño puchero.

— Lo siento, no sabía que hacía eso ...

— umm, es ovio que debo estar preocupada, desde luego soy tú... — Emma se puso de pie y con una mano tapo la boca de la persona frente a ella.

— No lo digas, ya se quien eres, no hace falta que me lo repitas — la soltó dejando un poco en shock a la chica.

— enserio? - sonrió.

— Si.

— Okey entonces vayamos a clases

— Ok.

Aunque todo parezca que se allá arreglado la verdad es que no, Emma no volvió a casa de sus padres después de aquella discusión. Ella se quedó en su condominio hasta que iniciaron las clases es decir toda una semana.

— Mamá, todo está bien? — pregunto Ek, quien se asomo a la cocina.

— Eh...si si — saco de sus pensamientos a quien hace unos momentos se veía algo preocupada — ten toma tu desayuno y ve a la escuela lo más rápido que puedas — el menor miró alrededor — que esperas?

— Emma, ella no a vuelto aún?

— Eh...debe estar ocupada, me llamo hace unos días y dijo que se estaba preparando para las clases — la persona que acaba de hablar estaba mintiendo pues de quién estaban hablando jamás llamo.

— Oh...— pensó por un momento — entonces, la iré a ver cuándo mis clases acaben...

— No creo que sea necesario.

— umm — hizo un pequeño berrinche — por qué no?

— Debe estar ocupada...

— Mamá, es el primer día de clases, no creo que esté demasiado ocupada como para no tener tiempo para su querido y joven hermano — tomo un poco del jugo que estaba en el vaso — además, es mi primer día en la universidad, ella podría enseñarme un poco más, así estaría más informado para poder elegir en el club que quiero estudiar...

— Okey... entonces llévale esto — le dió una pequeña bolsa — es una merienda, así no estará hambrienta.

— Ok — la tomo y se puso de pie — será mejor que me valla, sino quiero llegar tarde — sonrió.

— Pero aún es temprano...Ek termina tu desayuno — ordeno pues sabía las intenciones de su hijo menor.

— Ya lo tome todo,

— Ve a ver a Emma después de las clases — recalcó.

— Ok, lo haré, adiós

— Hey! No dije que podías irte...