PREFACIO

425 56 10
                                    

Hace tiempo, mis padres no sabían que hacer conmigo, era un chico listo, pero era un chico con problemas de ira. Durante la secundaria, en mi primer año, ocurrió un suceso que provoco que todos se alejaran de mí, y luego, para la universidad tuve que cambiarme de Londres a Italia, nueva escuela y nuevos compañeros que no sabían ese pequeño detalle, yo no buscaba problemas, no buscaba... nada.

Pero todo me encontró.

El primer día de clases, me tope, literalmente, con el chico equivocado... ¿o tal vez él se topó con el equivocado?

Deje de crecer después del metro con cincuenta y cinco y eso a ese chico se le hizo algo... adecuado para tener a su nueva víctima de hacerle bullying.

Mientras caminaba por el pasillo para dirigirme a la siguiente clase y tratando de comprender lo mejor posible el italiano de mi horario, porque era genial hablándolo y comprendiéndolo, pero pésimo escribiéndolo y leyéndolo, mi hombro choco con un chico mucho más alto que yo.

—Mira por donde vas duende de mierda— en ese momento decidí tranquilizarme, ignorarlo y dejar pasar todo, porque no quería pasar cuatro años aislado de nuevo. —¿A caso no me escuchaste imbécil? Te voy a dar una lección— voltee a mirarlo cuando me jalo de los cabellos, de reojo vi que un chico mucho más alto que yo y muy guapo se acercaba a ayudar, pero era demasiado tarde, mi ira ya estaba fuera de control.

Le di una patada al estúpido brabucón, más fuerte de la que él se esperaba y cargada de ira, tirándolo al piso y subiéndome encima de este, comencé a repartirle golpes a diestra y siniestra.

Varios profesores y ni sus amigos me podían detener, hasta que ese chico, que más tarde supe que se llamaba Khali, lo hizo, él solo me separo de ese imbécil y me inmovilizó hasta mi patético problema mermo.

Él y solo él.

Creía que me iban a echar de la universidad, creí que todo había acabado para mí, pero Khali, que se convirtió en mi amigo y yo en el suyo, "apelo" para que no hubiera cargos en mi contra.

Khali, ese chico con el que me case a los veinte años, ese que ame y amo incondicionalmente, Khali Visconti, hombre que, a sus veintiún años, al mes de casarnos, asumió el cargo de rey de la mafia italiana y yo, también, siempre acompañándolo, siempre juntos, amándonos como nunca... al menos eso creía, hasta que su infidelidad provoco muchas cosas, pero lo peor que pudo provocar fue volverme un completo peligro. 



............................................

TENEMOS UNA NUEVA HISTORIA, ESPERO LES GUSTE Y NOS LEEMOS PRONTO...

PELIGROSA AMNESIA +21Donde viven las historias. Descúbrelo ahora