Lejos y cerca de ti. [ Kokonui ]

Capítulo °1 [ Secuestro]

Kokonoi Hajime, un maniático por el dinero, las apuestas y el lavado del mismo era su pasión, sin embargo, este no llenaba su corazón, pues necesitaba algo o quizá alguien para llenar su apiedrado corazón.

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- ¿Entonces dices que puedes conseguir toda esa cantidad de dinero en un día?, suena como algo estúpidamente imposible. - Hablaba un chico de cabellos violeta con algo de negro. Estaba verdaderamente asombrado.

- Si decides no creerme, no pasa nada, no es como si me afectará. - Refutó nuestro protagonista de cabellos blanquecinos, con una expresión de fastidio.

Su carácter baila por un hilo, pues es muy inestable y ahora más que no encuentra una razón por la cual vivir, además de su preciado dinero.

Los hermanos Haitani tampoco ayudaban mucho, pues verlo estresado por todo era su diversión del día a día, cosa que Koko no le daba mucha importancia; podría decirse que ya era costumbre.

- Eres increíblemente patético, ¿como piensas tener esa suma de dinero en un día?, ¿con qué cabeza piensas? - Dijo en tono burlon el mayor de los Haitani.

- Con las de abajo, idiota. - Tomo un sorbo de whisky, no era muy fan del licor pero era lo único que podía calmarlo. - he realizado tantos lavados de dinero como no lo creen, no están hablando con un estúpido.

Su tono de voz salía con enojo y fastidio, escuchar las voces tan sofocantes de ese par, era un dolor de cabeza.

- Bueno, bueno, confiamos en ti.

- Si, lo dejamos en sus manos, su majestad.

Los dos chicos salieron de lo que sería su oficina de trabajo. Por fin, un suspiro abandonando sus pulmones; esto debido a la paz interna que tenía.

Sumar toda esa cantidad de plata era fácil, pero ahora quería continuar con lo que empezó hace más de 4 meses, y eso era encontrar el paradero de su amado. Nunca tuvo en cuenta que una misión sería tan difícil, esta era relacionada con la persona que tanto anhela tener consigo.

Entonces, ¿donde te escondes?..

Volteó la pizarra donde tenia cada cuenta anotada de sus ganancias, para dar a su lado de atrás, que parecía la persecución de un criminal que escapo de su celda. Cada hilo rojo guiaba a una foto distinta, parecía un loco con todo aquello pero estaba tan cerca; tan cerca de tenerlo de nuevo.

- Seishu Inui... Pronto estarás conmigo, quieras o no. - Su malicia lo delata, quería a su amor junto a él lo más rápido posible.

Hoy, a las 10:00 p.m. Llevará a cabo su gran investigación, se hará realidad su deseo. Nada podía salir mal, todo estaba pautado para esa fecha y hora. No podía desaprovechar ninguna de las posibilidades que se le presenten.

El plan estaba en que Inui saldría a esa hora, puesto a que era el momento de cerrar el taller de motocicletas, era perfecto, ya que Draken no estaría presente, estaba en su boda con una chica rubia, y había un montón de trabajo por atender, a esto Inui se ofreció para quedarse, dijo que solo iría a la celebración y no a la ceremonia.

¿Como se todo esto?, fácil, no dormir en 4 meses seguidos es la mejor inversión de mi vida.

[...]

Inupi

Estaba saliendo del taller, sacudiendo sus manos, estaban llenas de polvo. Estiró los brazos para bajar el santa maría del negocio, terminando por poner el seguro con un candado de hierro.