Trato

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Chay se había despertado en una cama vacía, lo cual era agradable, ya que no tenía idea de cómo actuaría con el atractivo hombre que lo había secuestrado 'oficialmente' la noche anterior, sin mencionar su acuerdo para cortejar a Chay.

Chay no estaba seguro de cómo sentirse. Pero, con la forma en que abordaba todos sus problemas antes, Chay dejó el problema a un lado y continuó con su día. Solo será él mismo con el hombre atractivo.

Suficientemente fácil.

Afortunadamente, había nuevos suministros para la ducha y ropa guardada para él en la cama.

Su ropa.

Desde su casa.

Chay se encogió de hombros mientras miraba los suministros; siempre y cuando no fuera Kim quien hurgó en su cajón, estaba bien. No incómodo en absoluto.

Chay caminó hacia la sala de estar después de una ducha muy necesaria, y casi gritó cuando vio a un guardaespaldas familiar parado en el medio de la sala de estar, luciendo muy incómodo y fuera de lugar.

"Uh... hola... Peter, ¿verdad?" Chay cuestionó.

"Es Pete". Corrigió el otro, relajándose un poco ante el rostro familiar.

"Cierto... ¿Qué estás haciendo aquí, si está bien preguntar?"

Pete se aclaró la garganta. “Vine en nombre del jefe Kinn para negociar su liberación con el jefe Kim ya que su hermano contactó al jefe Kinn esta mañana. Lo más probable es que esté en la casa principal mañana a más tardar si confirmamos su seguridad.

Chay asintió, procesando lo que el otro había dicho. "Vaya. Bueno, Kim no está aquí. Pienso."

No lo es. Me dijeron que esperara”. Pete confirmó.

Chay asintió. "Uh, ¿quieres algo de comida entonces?"

"Eh..."

“Vamos, soy mucho mejor cocinero que mi hermano… con algunas cosas.”

“O-bien.” Pete estuvo de acuerdo, aunque vacilante. 

"Esto es realmente muy bueno". Pete felicitó mientras los dos estaban sentados en la mesa del desayuno, comiendo. Bueno, fue el desayuno para Chay y el almuerzo para Pete.

No había mucho en la cocina, Kim probablemente no cocinaba para sí mismo, pero Chay encontró suficiente para hacer ramen amateur.

"Gracias. Hice lo que pude con lo que tenía, aunque lo que tenía no era mucho, hice lo que pude”. Chay habló sin prestar atención a sus palabras.

Pete parpadeó, repitiendo la frase en su mente. "Vaya."

"¿Qué?" preguntó Chay sin darse cuenta.

"Hablas muy... confusamente".

"¿Como un hada?" preguntó Chay, radiante.

"Eh... ¿No lo sé?"

“¿No lees saberes? Se sabe que las hadas hablan con engaños para poder atrapar a la gente.

"No era importante para mí estudiar... las hadas".

"Aburrido."

Pete hizo un puchero.

"Sabes, no puedo creer que tendré que decirle a la gente en el futuro que mi novio y yo nos juntamos después de que él me secuestró para que su hermano pudiera atraer a mi propio hermano".

Pete se encogió. "Uh... no tienes que convertirlo en tu novio si no-"

“Oh no, voy a hacerlo. Ese hombre será mi novio mañana, te lo garantizo. Chay anunció con confianza.

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