¡ nueve !

277 37 12
                                    

Dos días después, Hyunjin seguía sin saber sobre Minho y su extraño comportamiento, y el mayor le ignoraba olímpicamente cuando los tres se juntaban diariamente a almorzar como era costumbre desde que se habían conocido.

Hyunjin no lo entendía y se sentía algo frustrado, ¿qué había hecho mal? Se preguntaba por la hostil actitud de su hyung. No estaba acostumbrado a la indiferencia de Lee contra él, el pelinaranja siempre estaba atento con su persona, le acariciaba el cabello luego del almuerzo y cuando les quedaba tiempo libre, se tomaba el tiempo para comer con él porque Hyunjin era lento al hacerlo, siempre le escuchaba con una atención impresionante, con esos ojos almendrados atentos encima suyo. Minho todos los días le mandaba los bocetos de los diseños que hacía o le sacaba fotos a alguno de sus gatos porque sabía que a él le gustaba verlos.

Pero ahora nada, y Hwang extrañaba a su dulce y atento amigo de ojos gatunos, ese que ahora mismo ni si quiera se había despedido de él al levantarse luego de comer e ir a botar sus envases, dejándole con Bang que le miraba como si fuese un idiota mientras comía su segundo envase de ramen con entusiasmo. Hyunjin miró esa cabellera naranja con pinches de colores hasta que desapareció de su vista entre el montón de gente que se encontraba en el comedor al aire libre a pesar del frío.

— Hyung —llamó Hyunjin, aún sin girarse al australiano, quien alzó las cejas con comida en la boca y en los palillos—. ¿Tú sabes que le pasa a Minho-hyung? Me ha estado ignorando estos dos días...

Se enfocó en Christopher al ver que Lee ya se había ido por completo, se sorprendió al verlo con un tic en el ojo y el rostro ensombrecido, con la boca llena de ramen y los palillos detenidos contra sus labios. Hyunjin le miró confundido, y vió al contrario exhalar con rabia mientras terminaba de comer lo que tenía en la boca y tiraba su envase aún con comida en la mesa junto a los palillos.

— ¿Me estás tomando el pelo? —preguntó con brusquedad, tomando desprevenido a Hwang y haciéndole sobresaltar.

— ¿No...? —su tono se llenó de miedo.

Christopher exhaló, llevándose las manos a la frente para mirar al suelo y comenzar a murmurar números para calmar un poco la fulminante rabia y no encestarle un puñetazo al menor.

— ¿A ti acaso no te entra nada más en la cabeza que no sea Jeongin y tu carrera como profesor de matemáticas?

Hyunjin parpadeó confundido, ¿qué tenían que ver Jeongin y las matemáticas?

— No te entiendo, Chris, ¿por qué estás enojado? —el azabache menor intentó tocar a su mejor amigo para mirarle el rostro, pero sintió un fuerte empujón de parte de este al erguirse.

— ¡Que le gustas a Minho, imbécil!

Parpadeó, una, dos, no sabe cuántas veces en total, intentando procesar aquello. Y comenzó a reírse gracioso, cerrando los ojos y negando con la cabeza ante la broma que le había hecho Bang, ¿gustarle a Minho? Claro que no, era imposible que eso pasara.

Se carcajeó sobre su almuerzo un par de segundos más antes de abrir los ojos nuevamente y mirar a Chan, deteniéndose abruptamente al ver que él no se estaba riendo, no estaba sonriendo y tenía una vena marcada en el cuello sin dejar ese tic en el ojo. Christopher no estaba bromeando con él.

— P-pero, ¿qué dices? —borró todo rastro de risa y su boca cayó en una mueca, sus brazos cayendo a sus costados.

— No puede ser cierto —le escuchó a duras penas, antes de chillar al ver a Chan alejar su bandeja de comida y dejar caer su cabeza repetidas veces sobre la mesa, golpeándose una y otra vez con frustración antes de volver a mirarlo como un lunático con el cabello revuelto y una sonrisa macabra y enojada, los ojos brillantes en furia—. Eres un idiota, Hyunjin, ¿acaso nunca te has dado cuenta de todas las veces que Minho ha mostrado interés en ti? ¿En cómo siempre vela por ti y si le pides que me tire piedras el lo haría sin dudar? —Christopher alzó las cejas, extendiendo las manos con obviedad, y Hyunjin volvió a pestañear sin captarle.

── kindergarten boy !Donde viven las historias. Descúbrelo ahora