Starman (Regular Show)

Prólogo

Los pies se arrastraban por el suelo con cansancio, aquella chica salía del instituto de investigación tras haber entregado su reporte de avances y planeaba volver a casa lo antes posible.

El taxi la esperaba en la entrada, pero podía sentir como sus ojos se cerraban solos, haciendo que su objetivo se viera más lejos de lo que realmente estaba. Estaba a punto de caerse del sueño, de echo, estaba en proceso.

El sonido de su teléfono la despertó deteniendo abruptamente su caída al hacerla pisar de nuevo la realidad. Respondió la llamada con calma al ver de quien se trataba.

—Khía, ¿Sucede algo? –Preguntó reanudando su andar cansino, siendo la respuesta de una voz distinta a la que esperaba.–

—No, bueno, si pasa algo. –Se escuchaba una discusión de fondo.– ¡A HIAKAI SE LE CRUZARON LOS CABLES Y ACABA DE TIRAR MIS PROTEÍNAS POR EL INODORO!

—¡ESAS COSAS SON MALAS PARA ELLA, NO LO ENTIENDE Y TUVE QUE TOMAR MEDIDAS DRÁSTICAS! –La voz rasposa había sido interrumpida por una robótica y algo distorsionada, quizás por el enojo.–

—DRÁSTICA ES LA GOLPIZA QUE TE VOY A DAR, ESTÚPIDA COMPUTADORA-

Realmente no estaba procesando todo ante la fatiga mental que llevaba, aún así sentía que algo no andaba bien por fuera de la discusión. De repente, encajó en su cabeza y toda pizca de sueño se marchó de su ser.

—Esperen un segundo, ¿Dónde está Khía y porqué me llamaron desde su teléfono? –Hubo un silencio de por medio, alguien iba a pasarla mal cuando volviera a casa.– Sharah, Hiakai, ¿DÓNDE ESTA KHÍA?

—Yo había llamado, pero me quitaron el teléfono por miedo a que las acusara. –Habló una voz suave y algo quebradiza al fondo.–

Una corriente de adrenalina se aventuró por sus venas junto a la sensación de enojo, estaban discutiendo frente a su pequeña y frágil consentida. Soltó un rápido "Voy para allá" antes de colgar y correr el trayecto que le quedaba hasta llegar con el transporte al cual le pidió que acelerara.

Una vez llegó a su casa abrió la puerta de golpe dejando notar su aura intranquila encontrando a la chica fornida con rasgos de tiburón discutiendo con la joven de cabeza de monitor. Paseando su vista notó uno que otro mueble tirado, realmente no fue tanto comparado con otras veces, aunque ver a la joven alta de cabellos cortos y oscuros escondida detrás de la entrada a la cocina consiguió hacerla explotar.

—Chicas... –Habló con total seriedad instalando una inmensa tensión entre las que se hallaban peleando.– Creí haber dejado MUY en claro que no debían discutir frente a la pequeña Khía. ¿O acaso solo lo imaginé?

Ambas se enderezaron al verla acercarse lentamente con porte autoritario deteniéndose una vez estuvieron frente a frente.

—La consientes mucho... –Balbuceó la de aletas bufando ligeramente por sus branquias haciendo que la castaña le mirara de manera fija.–

—Dime eso luego de actuar de manera madura ante una situación como esta. –Respondió con severidad.–

—Esas proteínas me costaron mucho!

—Tenían un compuesto que te haría daño a la larga, debiste leer los ingredientes antes de comprar esa marca... –Comentó ahora la pantalla con la mirada clavada al suelo.–

La castaña respiró hondo, ambas eran muy infantiles, realmente, trataba a las tres como sus hijas a pesar de que no les llevara mucha ventaja en edad. Miró al par que tenía en frente, tomó la mano de cada una y las estrechó entre sí a la fuerza. Eran las mejores amigas, pero pasaba a ser todo lo contrario cuando discutían.

—Hablen bien las cosas primero, estuvieron mal, tú debiste decirle porqué era malo que las consumiera y tú debiste escucharla en vez de gritarle... Y Ambas debieron hablar en lugar de discutir en casa –Sentenció apretando la muñeca de cada una con algo de fuerza haciendo que se quejaran para luego soltarlas.– Quiero que se disculpen, iré a acostar a Khía, debe levantarse temprano.

Dejó la sala dirigiéndose a la cocina donde la alta joven de apariencia descuidada se encontraba sentada en el suelo. Ella, al notar su presencia abrió sus brazos brindándole un dulce abrazo.

—Fuiste muy valiente, Khía. Lo hiciste bien. –La arrulló y dejó un beso en su frente.– Por ahora debes dormir, mañana temprano tienes clases.

—Pero ya es hoy, y son las 6:12 am...

Algunas cuentas mentales rápidas le dejaron ver que pasó mucho tiempo metida en la entrega de los avances, una rápida mirada por la ventana le mostró que estaba amaneciendo a lo que gritó internamente. Suspiró evitando soltar el estrés que llevaba.

—Tienes razón, pequeña. ¡Todas! Hay que arreglarse rápido, las llevaré en el auto. Se hace tarde. –Aplaudió un par de veces para que reaccionaran y cada quien fuera a hacer lo suyo. Ella fue a lavarse la cara para no caer rendida por la autopista.

Al volver a casa luego de dejar a las tres en la universidad subió las largas escaleras hasta su cuarto. Su trabajo tenía muy buenos beneficios, entre ellos el sueldo para costearse una gran casa, dándose así el lujo de un piso completo para su habitación.

¿Lo necesitaba? No realmente, con un cuarto donde entrara una cama ella viviría cómoda, era más un capricho que una necesidad.

Se lanzó al fin en aquella cómoda cama, quería descansar antes de ir a buscar a las chicas por la tarde. Confiaba en que ellas podrían llegar, pero si no las vigilaba podrían discutir por cualquier cosa, su conflicto aún seguía muy reciente y no quería arriesgarse. Bostezó dejándose llevar por Morfeo, quien buscaba llevarla a sus brazos.

Soñó con que estaba en el espacio, flotando junto con el polvo estelar, justo como todas las noches. Algo que siempre quiso pero no podría cumplir. Un sueño que había fracasado pero que al menos podía mantener cerca.

Si bien la rechazaron como astronauta pudo entrar al campo de estudio del cielo como astrónoma. Investigando lo que siempre quiso, desde la tierra...

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Si... Algo corto para hacer la idea base de lo que escribiré

Algunos datos de las cuatro, solo porque si-

-Ellie Palen - 26 años: Trabaja como astrónoma, es quien comúnmente costea los gastos de todas, tiene un gran instinto protector. Siempre se ve cansada, consiente mucho a las personas tranquilas, humana, déjenla dormir un rato, por favor-

-Sharah Pilgrim - 26 años: Estudiante de biología marina, enseña natación los fines de semana, esta fuertota, niña malcriada por dentro(por fuera también, pero tiene sus limites), tiene braquets y pirceings, alta, tiburón peregrino, grita mucho cuando ve algún chico que le parezca atractivo.

-Hiac-44901AI - Varios añitos, no te sé decir (Si sé, pero no es algo muy importante en ella): Estudiante de ciencias sociales, saca cuentas rápido, esta hecha de cables y metal, amiga qué comes?, se roba las baterías del control en la fiesta cuando todos están pedos, se ríe por todo, debe tener disquetes bajo su cama, apaga la pantalla cuando se duerme, tantos idiomas que conoce y solo habla en pendejo, computadora, le gustan los stickers.

-Khía Palen - 22 años mas o menos: Estudiante de publicidad, hace la tarea en lo que llega a la casa, "niña de bien", se la encontraron por ahí y la adoptaron, no tenía apellido y Ellie le dio el suyo, inocente, consentida, le teme a la oscuridad, si te descuidas se te pega cual chicle, regala piedritas y flores a quienes quiere, abrazos, no sabe vestirse, ojeras, sabe hacer sandwiches, humana, le gusta la chocomilk.

Es todo, espero pases lindo lo que resta del día!