FL: Namjoon un alfa viudo y padre soltero de su tierna cachorra, Hyejin.
Seokjin, también un omega viudo, siendo profesor de primaria y padre de Jisoo.
Ambos se conocen gracias a que una de las cachorras se había perdido en un parque de diversiones...
En los pasillos de la preparatoria, el alfa Namjoon, quien era un buen estudiante hasta que conoció a su competencia, Park Jihyo. Ambos siendo rivales por demostrar quién es el mejor en tener buenas notas, pero todo cambió en un instante, pasando de competidores a pareja.
El moreno no dudó en expresar sus sentimientos a la omega, ella tampoco los negó y aceptaron en salir.
Hasta que se graduaron juntos y terminaron sus carreras, sabiendo que estarían listos para dar el siguiente paso.
El alfa lleno de alegría compró el anillo de compromiso, el más bello de todos para que resaltara en la linda omega, que pronto se convertiría en su esposa. Planeando una salida juntos y sorprendiendo a la chica, que con lágrimas dio el sí.
Todos sus amigos felices por la noticia al recibir las invitaciones de boda, hasta que llegó el día tan esperado, admirando a la omega llegar hacia el altar con el magnífico vestido blanco y las flores que combinaban con su aroma.
Realmente estaba enamorado de ella, a pesar de no ser destinados, ella siempre será el amor de su vida.
Un año después de haberse casado, Jihyo la esperaba con una linda sorpresa y su sonrisa podía delatarla, pero trataba de disimular.
— ¡Cariño, ya estoy en casa! — Namjoon se cambiaba los zapatos por una pantuflas, después de un arduo trabajo en el hospital.
— Namjoon, que bueno que llegas. — Jihyo lo abraza y lo recibe con un cálido beso.
— ¿Pasa algo? Te noto extraña. — pregunta con preocupación, siempre está al pendiente de su esposa, aunque ella también va a trabajar en la cafetería del que tanto se esforzó en construir.
— Solo cierra los ojos, además es algo especial y no quiero que se arruine la sorpresa.
El moreno obedeció, pero muchas cosas pasaban por su mente.
— ¿No es nuestro aniversario, ni tu cumpleaños, verdad? Tampoco es el mío… ¿No es navidad? — respondía con los ojos cerrados.
— No amor, esto es mucho mejor. — se acercó un poco al alfa — Extiende tus manos, por favor.
— Espero que no tengas un insecto.
— ¡Hazme caso!
— Bien, lo haré. — extendió sus manos y Jihyo colocó unos pequeños zapatos de bebé.
— Abre los ojos…
Namjoon no tenía palabras, pero su rostro se iluminó al ver aquellos zapatos de lana, se puso más sensible al ver la ecografía en manos de su esposa.
— Vamos a ser papás.
— ¡Gracias amor! — el alfa la abrazó — Seré el mejor padre del mundo.
— De eso estoy muy segura.
— Por ahora no tendrás que hacer mucho esfuerzo, te puede hacer daño. — acarició el vientre de la omega — Tranquila cachorra, papi y mami te cuidarán.
— ¿Cómo estás tan seguro que será una niña?
— Mi instinto paterno me lo dice.
— Los alfas y sus supersticiones. — rodó los ojos.
— Vamos a llamarla Jihyo, será como tú.
— Tampoco así.
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