Un mes en celo 𓆙ʰʸᵘⁿᶜʰᵃⁿ𓆙

🌸⁸vo día🌸

Esto debe ser una broma

Hyunjinbottom!

El camino de regreso a casa fue, en pocas palabras, tranquilo. El aroma a chocolate se iba disminuyendo conforme el tiempo pasaba. BangChan parecía estarse durmiendo en una pequeña esquina de mí auto.
Sus cachetes todavía tenían ese hermoso tono rosado, ¿de verdad le causó vergüenza hacerlo ahí? No quiero preguntar.

- Chris, ¿todo bien? Pareces... no lo sé.

- Estoy bien hyung. Solo un poco cansado.

- ¿Por qué mí vida?

El peli naranja bostezó.

- Oh, tienes sueño. Ya llegaremos a casa y dormirás tal cual bebé. - reí bajito.

El más bajo cerró sus lindos ojos en un intento de dormir, lo cual, desgraciadamente, fue inútil.
Miles de baches le interrumpían el sueño, hasta que hicieron que su cuerpo se cayera en ambos asientos.

- Hyung~

- Ya llegamos, ya falta poco.

Menos de media hora íbamos a llegar, pero el tráfico es demasiado extenso; millones de autos estaban yendo a un paso lento, como si fueran los únicos en el mundo que pueden andar por ahí.

Al llegar, como siempre, estaciono mí auto lo más cerca posible para así llegar a la puerta y abrirla.

- Bueno pequeño, creo que necesitas un breve descanso, ¿no es así? - empecé a entablar una simple conversación. - ¿No crees que es buena idea dormir en mí pecho, lindo?

El más bajo asintió.
De inmediato, levanté su cuerpo y lo llevé a la pequeña cabaña en medio de una carretera abandonada (bueno, no tanto).

Al estar adentro, Chan se agarró de mí camisa con el miedo de caerse.

- Tranquilo, no te voy a tirar. - una de sus manos se dirigió hacia mi nuca.
Su aroma se impregnó en mis fosas nasales.

- Hyunjin, ¿me puedes besar?

- ¿Eh? Claro. - automáticamente besé los labios pomposos. Un pequeño gemido gutural se escuchó.

- Se ve que te encantan pequeño.

El peli naranja no dijo nada al respecto, siguió besándome mientras sentía como su esencia todavía se impregnaba a mi con más fuerza.

- Te amo, Hyunjin~. - dijo entre gemidos.

- Yo igual, bebé. Pero necesito bañarme. ¿Las cosas las dejaste en la mesa de la cocina?

- Sí, hurón.

Dejé el cuerpo en uno de los sillones individuales, caminé hasta la cocina para encontrarme con las bolsas. Las agarré y las llevé.

Antes de llegar a mi habitación, sentí como el aroma de Bangchan llegaba a la velocidad de la luz a mis fosas nasales. 
¿Será que Chan sigue en celo? No lo creo.

Mi cola de hurón se movía sin parar de lado a lado, dándome señales de que Bang sí seguía en celo. Esto debe ser una broma.

- ¡Hyunjin! ¡Te necesito!

Oh Dios. Me duele tanto la polla porque estoy teniendo sexo siete días seguidos.

- ¿Qué le pasa a mi pequeño lobo? ¿Todo bien? - eso es, actua como si nada de esto estaría pasando.