Parte 2

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Condujeron por el camino principal con desánimo y sin rastro de sueño, mirando por la ventana cada cierto tiempo, lograron ver lo que parecía una manada variada de cambia formas, lobos, zorros, coyotes, entre otros corriendo detrás de un gran lobo negro, todos transformados sin importarles su presencia al costado del camino.

- ¿Eso no está en contra de las leyes? – cuestiono Clary – un mundano los podría ver

- Lo es, podría incluso terminar en la muerto – comento Izzi – pero analizando bien como actuó el oficial, parece cosa común su presencia aquí.

- Si no pueden salir del pueblo, no les queda otra opción que aprender a convivir con los humanos, – comento Jace – seguramente en este lugar habrá una gran concentración criaturas de las sombras y nosotros los únicos Nephilim, esto va a estar jodido.

- El alfa está viendo hacia acá – comento Maiya – quiero ir también.

- No primero iremos a la veterinaria – hablo Simon.

El camino paso sin más exaltaciones, en todo caso las pocas personas que lograron ver parecía completamente normal aunque más de uno aseguraba que podían ver un vampiro en algún lugar, llegaron a la veterinaria un lugar completamente normal en su opinión sin un glamurt para esconderlo. Dentro habían algunas personas en la sala de espera con heridas en diferentes niveles de gravedad todas ella criaturas de las sombras, en una puerta delante se podía leer la palabra "registro" y un horario de 1 p.m. a 11 a.m.

- ¿qué hora es? – interrogo el único brujo del grupo

- Las 4 de la madrugada – contesto Simon su reloj interno era el mejor – ¿tendremos que esperar o qué? – pregunto molesto no le hacía gracia quedarse en el auto.

- Tal vez un hotel

- No me quedare en nada menor de tres estrellas – intervino Magnus – primero muerto antes que pisar uno de esos lugares.

- ¿Por qué eso no me sorprende de ti, Magnus? – los nombrados voltearon a la vos desconocida, encontrando a un hombre de color calvo con parches de piel de reptil y ojos completamente negros.

- ¿Alan? – el brujo reconoció al contrario – ¿aquí has estado estos últimos 100 años?, ¿Cómo llegaste?, ¿Qué esa barrera?, ¿y cómo salimos?

- Viejo amigo – la contrario sonreía divertido con la lluvia de preguntas - dame un momento, me pongo en contacto con el del registro y hablamos después, tengo que atender a más personas... tomen asiento.

- Vallan ustedes tengo que comenzar a acomodarme para dormir – dijo Simon volviendo al auto.

Los demás se sentaron en la sala de espera mirando como los "paciente" eran atendidos por los brujos, donde habían por lo menos 4 brujos diferentes quince minutos después se abrió la puerta, mostrando a un chico hada parado en el lumbral por regla general era visualmente hermoso, pero al observarlo con la pura cara podría matar a alguien, una taza de café grande en su mano izquierda.

- Espero que sea bueno Deaton – gruño grito desde la puerta

- Es un brujo nuevo – se escuchó la vos ahogada desde donde entro Alan.

El chico dio un largo sorbo al café volteando a ver a los recién llegados, sus ojos reconocieron al brujo al instante, asintiendo después del largo trago les hablo.

- Bienvenidos a Beacon Hills, cariñosamente conocida como "la boca del infierno" – los hiso pasar a todos a la oficina sorprendentemente espaciosa – pueden llamarme Stiles, soy parte de la manada residente y organizador de los recién llegados.

AtrapadosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora