-Bienvenida-

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-Draco Malfoy-

Me encontraba en el tren de regreso a Hogwarts, un año más comenzaba, era raro pensar como los años se deslizaban ágilmente por mis manos sin que yo lo notara en lo más mínimo, pues pensar en mi primer día en el colegio parecía tan lejano. Ese momento exacto en el que el sombrero seleccionador gritó "Slytherin" para que luego la mesa de esa casa estallara en gritos y aplausos se repetía en mi mente sin césar, los nervios, mis manos sudadas e inquietas, esos ojos fríos y grises moviéndose en todas direcciones tratando de ocultar la obvia ansiedad que sentía por saber que casa me iba a acompañar a lo largo de mi estadía en Hogwarts, solo una cosa consumía mi mente en aquel momento "Asegurate de que te toque en Slytherin" las únicas palabras que salieron de la boca de mi padre antes de que yo me subiera al tren en dirección a mi primer año en Hogwarts.

-Draco-

Una voz me sacó de mis pensamientos.

-ya te dije que no me gusta que me llames por mi nombre Parkinson-

-lo siento Malfoy-

De repente un moreno entró corriendo al vagón y se sentó con fuerza en los asientos que había en frente mío.

-¡rubio! ¡adivina!-

-genial, una que me llama por mi nombre y otro con apodos, es Malfoy y no soy adivino, Zabini-

-lo que sea, tengo chisme de algo que pasará pronto-

-¿es sobre mi o algo relacionado conmigo?-

El me miró confundido.

-no-

-entonces, es irrelevante-

-lo que digas gruñón, cuando te enteres te va a gustar, estoy seguro, vámonos Pansy, todos tienen que enterarse antes de llegar a Hogwarts, tenemos trabajo que hacer-

Ambos abandonaron el lugar dejándome solo de nuevo, odiaba admitirlo pero la curiosidad me estuvo recalcomiendo todo el viaje pero no iba a permitirme preguntar luego de haberlos rechazado, solo esperaba que fuera algo que hiciera cuarto año más interesante, me quede los minutos restantes del viaje pensando en que podría ser.

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Al bajar del tren no pued encontrar ni a Zabini ni a Parkinson así que comencé a caminar solo, tampoco tuve suerte en encontrar a Crabbe y Goyle, no tenía ni idea de donde se podían haber mentido aquellos dos con tal de llegar antes al gran comedor y elegir un buen lugar para la hora de la cena.

-¡Malfoy!-

Escuche una voz reconocida llamándome, frene mi paso esperando hasta que este llegara a mi lado, luego seguí caminando. Marcus Flint, capitán del equipo de quidditch.

-¿te enteraste? Vamos a tener chicas nuevas en hogwart por un año, se dice que todas están buenas-

Me reí internamente, escuchar a alguien tan desagradable como el hablar de las mujeres así me daba risa, nisiquiera la chica más fea caería tan bajo de estar con alguien como el.

-no me había enterado ¿se puede saber por que?-

Pregunte con calma sin despegar mi mirada del frente.

-no se, perdí esa información, lo único que importa aquí es la variedad de chicas con las que podremos estar ¿verdad?-

-si...claro-

bitter love [Draco Malfoy]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora