A escondidas | Minsung

A escondidas

Este capítulo va a estar conectado con el anterior, eso quiere decir que van a seguir en el mismo día de la presentación de los KBS Music Bank.

- Hicieron un buen trabajo chicos, ahora tienen un descanso, así que aprovéchenlo porque luego tienen que ir al programa SKZ CODE para grabar, ¿bueno? - Indicó el manager.

Los miembros asintieron y se dedicaron a conversar sobre la reciente presentación que tuvieron. Mientras tanto Han estaba frente a un espejo arreglándose el cabello y sacándose cuidadosamente el sudor de su frente, no quería correr la base que tenía puesta, aunque esta era dos tonos más moreno que su piel; bueno eso ya era un tema personal, sin embargo, sabe que a Minho le encanta su tono de piel, y se lo recalca chorrocientas mil veces, al igual que sus lunares que eran unas bellas e inigualables constelaciones. Solo por Minho trata de no ser tan obsesivo con su tez.

De manera imprevista y sin darse cuenta el menor no se dio cuenta cuando unas manos se posaron en sus hombros, dio un pequeño salto y se le aceleró el corazón cuando vio a Minho en el reflejo del espejo. Su novio le sonrió, haciendo que en su estómago le revoloteen las mariposas.

- Lo hiciste muy bien Hannie, te felicito.

- Gracias Honnie... tú también lo hiciste demasiado bien - elogió el menor- además ese atuendo que llevas te queda muy sexy. - Coqueteo.

- Había pasado tiempo que no me decías Honnie -respondió Minho entre - risas- y gracias, pero tú tampoco te quedas atrás, Sung.

Por ese momento a Jisung se le había olvidado que estaba en una guerra con Minho, hasta habían comenzado a hablar como si nada mientras que el mayor le hacía un masaje, sin pasar a otras intenciones. Al menos en esa pequeña oportunidad a ambos se le había olvidado que aún el juego permanecía en pie.

Verdaderamente Minho cambiaba cuando no pensaba en cosas impuras, se volvía más tierno y meloso cuando estaba con Han, un verdadero cambio de personalidad.

- Minho... -Llamó el menor mirándolo fijamente en el reflejo del espejo. El nombrado seguía con el relajante masaje y lo miró más atento de lo que estaba.

- ¿Hm?

- Quiero besarte.

E inmediatamente el asombroso masaje de Minho se había detenido de golpe. El mayor tragó saliva y sintió como el calor se le subía a las mejillas.

A Han le habían entrado unas tremendas ganas de besar a Lee. Extrañaba el contacto de sus delgados labios contra los suyos, extrañaba el delicioso baile de sus lenguas y el cambio de saliva. Desde que habían empezado ese juego, no se habían dado ni un piquito, y eso está desesperando a Jisung... necesitaba urgentemente un beso de Minho.

- No sabes cuanto esperaba escuchar eso Hannie. Honestamente yo también he querido besarte, pero pensé que, que

- Dios Minho, tranquilízate, sé que extrañas besar mis lindos y carnosos labios - interrumpió el menor mientras abultaba sus labios. El chico se paró y tomó de la manga al mayor - ven, vamos a otro lugar.

Han se dirigió con Minho hacia la puerta dispuesto a salir del camerino a un lugar más privado, pero los dos se detuvieron por la mano del manager que tomó primero el picaporte.

- ¿Para dónde van? - Interrogó dándole una mirada a ambos.

- Vamos a tomar aire, aquí está muy encerrado. -Respondió el menor.

- Está bien, pero vuelvan unos minutos antes de las once y media. Los estilistas deben dejarlos bien arreglados antes de estar en el episodio.

- No se preocupe, volveremos antes para arreglarnos.