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Un viaje en carruaje de larga distancia fue mucho más difícil de lo que imaginaba.

Los momentos románticos, tal como se describen en las novelas Rofan comunes, son solo breves, y la mayoría de los momentos son batallas con tremendos movimientos de carroaje, mareos y aburrimiento en caminos sin pavimentar.

Aún así, en mi caso, había pocas desventajas del aburrimiento. ¡Piénsalo! ¡Es bastante extraño sentarme junto a mi favorito todo el día en un espacio pequeño y aburrido!

Sin embargo, pensé en algo para aliviar mi aburrimiento porque si no me avergonzaria de mi misma si continuaba mirando todo el tiempo la cara de Kaelus.

Tan pronto como pude, puse las herramientas de tejer que había recibido de Clarice en mi regazo y comencé a tejer una bufanda que se pudiera usar en un clima frío. Para ser honesta, no sé tejer nada más que bufandas.

Kaelus leía con las gafas y vio a través de mía pensamientos.

"¿Qué estas haciendo?"

"Es una bufanda. Solo estoy desaburriendo me con las manos"

"¿Es para mi?"

Es una pregunta en un tono indiferente, pero puedo sentir una sutil expectativa en ese tono.

Respondí con una sonrisa.

"Si sale mal, será para mi, si sale bien será para ti"

"..."

Parece insatisfecho, pero incluso si muero, no puedo dejar que use una fea bufanda alrededor de su cuello. La corbata que le di ya fue suficiente.

Kaelus abrió la ventana del carruaje. El aire fresco entro.

"El aire es nuy diferente por el norte"

"Mmm"

Kaelus asintió lentamente.

Es muy diferente a la temperatura. A diferencia de la capital, que tiene un clima templado durante todo el año excepto por una breve temporada de lluvias, el clima en el norte de Ática era básicamente "frío". Si, el clima era un poco malo, seguramente vendra una ventisca con la tormenta.

Entonces, la gente de Attica es famosa por su supervivencia dentro del imperio. También hay muchos guerreros valientes.

Al ver abierta la ventanilla del carruaje, el escolta se acercó.

"Si seguimos a este ritmo, podremos pasar la noche en un pueblo cercano y entrar en la propiedad de Atica mañana, Duque"

"Ya veo"

Fruncí el ceño ligeramente ante las palabras.

Todavía tomará otro día. Está muy lejos. Ya llevamos cinco días en un carruaje.

Kaelus sonrió en silencio, como si viera mi expresión.

"El duro viaje pronto terminará. Aguanta un poco más, Hess"

"Sí..."

De hecho, no toma tanto tiempo si viajábamos montando a caballo, aún así gracias a que en nuestra salida de la capital llevamos mucho equipaje y venía mucha gente no podíamos hacerlo de ese modo, así que nos moviamos de esta forma.

Delante y detrás del carruaje del ducado, donde Kaelus y yo íbamos, había un carruaje con los sirvientes dentro, incluida Clarice. Incluidos los hombres que escoltaban el carruaje, y el grupo que se dirigía a Ática no era un número pequeño para nada.

En proporción a la temperatura del aire de enfriamiento, el paisaje exterior también se volvió bastante monótono. En lugar de flores y árboles coloridos, las coníferas alargadas aumentaron en número.

Por Mi Favorito AbandonadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora