Y él no se rendía una y otra vez los golpes en la cara y los hematomas lo cubrían, sangraba muchísimo, el dolor de su cuerpo emanaba más y mas que cualquier otro día más que el dolor mismo Y aun así él no, no quería rendirse y no quería perder quería sentir el sufrimiento más y más vivificante en su interior hasta que él cayera o el mundo mismo se rindiera.
ESTÁS LEYENDO
poemas de una noche
Poesía365 Poemas para cada día del año relatando pequeñas metáforas y sueños como mariposas que vuelan en un caos perfecto.