Y el hombre grito, pero su boca se tapó, el silencio reclamaba su voz y el hombre quería gritar, desahogarse, llorar, pero no podía hacerlo, sus instintos le decían que no lo hiciera, pues pese a todo intento soñar con que lo hacía, intento soñar con que gritaba con que cantaba, pero las palabras no salían de su garganta y el cuchillo atravesó su cuello y manchando de sangre y dolor, sufrimiento, dejando al hombre frío moribundo y con la voz quebrada rogando por un abrazo.
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poemas de una noche
Poesía365 Poemas para cada día del año relatando pequeñas metáforas y sueños como mariposas que vuelan en un caos perfecto.
