Escapar Es Una Opción.

005

Anoche entre al refugio y la verdad la gente que me recibió fue muy amable y cariñosas, eso es algo que no experimento hace tiempo.

Flashback

- Llegamos...

- Muchas gracias, encerio, no se como voy a poder agradecerle esto.

- no se preocupe. Solo mantenga a la pequeña y a usted a salvo. Suelo venir aqui seguido. Así que, creo que nos seguiremos viendo.

- Muchas gracias, oficial...

- Dígame solo Drake. El oficial es muy formal. Y creo que, ya estamos en confianza.

No le conteste, solo me sonroje y baje para poder ir a buscar a Eli a la parte trasera de la camioneta.

Drake me ayudo a cargar mi bolso de mano y los otros con la ropa de Eli.

Me guió hacía la entrada y me abrió la puerta para que pueda pasar cómoda con mi niña en mis brazos.

Había una especie de recepción donde había una señora mayor a los cincuenta años, de tez morena con rizos y pelo corto. Unos lentes super coloridos que si los viera Eli, le encantaría.

- Buenas noches, María. -Dijo Drake.

- ¡Oficial Collins! No sabia que pasaría por aquí esta noche.

- María, ya hemos hablamos de lo de llamarme oficial Collins. Yo tampoco sabía que pasaría por aquí hoy pero bueno. Te traigo a dos pequeñas personas para que cuides y les des una habitación en tu casa comunitaria.

- ¡Mucho gusto! Soy María Webston, la dueña de este lugar y estoy más que encantada en recibirlas.

- Encerio muchas gracias. Soy Giovana Ruise, es un gusto conocerla señora Webston.

- ¡oh, vamos! ¡Por favor! Dime simplemente María, no quiero nada de formalidades por hoy.

- De acuerdo, María, se lo agradezco muchísimo.

- ven, te voy a llevar a tu habitación para que descanses y mañana podamos hacer algo de papelerio para que puedas quedarte oficialmente aquí o el tiempo que necesites.

- De acuerdo. ¿Drake, nos quieres acompañar?

- Las sigo, señoritas.

Maria me llevo hasta a la habitación en la que me quedaria estos dias hasta poder conseguir una casa, la cual, se veía cómoda para mi y para Eli. Tiene una cocina, un refrigerador, un sofá, una televisión, y una sola habitación con una cama matrimonial la cual es muy comoda para que durmamos las dos.

Me entrgo las llaves y me dio alguna indicaciones.

- La mayoría de personas aquí se levantan entre las nueva y las once, pero por ser tu primer día tienes permiso de quedarte más tiempo. Hay una reunión de apoyo emocional dos veces a la semana; Ya sabes, muchas aqui lo nesecitamos. Hay una para niños y otra para adultos, son los mismos días pero en distintos horarios. A las dos de la tarde se sirve el almuerzo y a las nueve de la noche la cena. Aunque, si llegas después no pasa nada, Mery se encarga de hacer siempre comida de más.

- Y por último pero no menos importante, tengo llave de todas las casas. Es solo por casos de emergencia. Ahora, que descanses bien linda.

- gracias y Drake... espero verte mañana.

- hasta mañana entonces, señorita Ruise.

Él se despidió de mi con un beso en la mejilla y se fue.

Procedi a ponerle a Eli su pijama y la acomode en un lado de la cama para que ella pudiera descansar.

Me dirijo a el sofa para poder hacer una llamada la cual me puede salvar o dejar peor de lo que estoy.

Llamada con Sierra Brina.

- ¿Hola?

- Hola, Sierra.

- ¿Qué quiere? ¿Paso algo? ¿Elizabeth esta bien?

- Si, ella está bien solo quería..

- Estas enterada la hora que es como para que tu andes llamando por la idiotez que te cargas.

- Si, lo estoy, solo quiero hablar contigo.

- Que lastima, por que yo tengo ganas de dormir sin tener que escuchas tu irritante voz de fondo en mis sueños ¿Porque tenfria que escucharte yo ahora? Cuando necesite hablar contigo me ignoraste totalmente, asi que ahora ahórrate la parte de niña arrepentida.

Llamada finalizada con Sierra Brina.

¡MIERDA!

¿cual es su puta necesidad de ser asi conmigo?

Les explicó, Sierra es mi hermana por parte materna. Éramos muy unidas hasta que empecé a salir con Luca, era muy raro que él me deja salir por que decía que era capaz de irme con cualquier otro y cuando mi mamá falleció yo intente ir a su funeral escapándome y fue una muy mala idea. Él se puso muy violento y me prohibió usar el teléfono, o más bien, lo destrozo contra la pared. Tener cualquier otro contacto con ese exterior era, con suerte, una vez a la semana, toda mi familia se enfureció conmigo por desaparecer tan drásticamente como lo hice en un momento tan complicado. La que más me lo reclamo fue Sierra al dejarla así de repente y bueno, muchos problemas más que tuve después de eso.