"Cuestión de Piel"

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Espontáneamente, justo como llegó, desapareció por los amplios jardines de la casa dejándome con la incertidumbre de saber si algún día la vida nos volvería a juntar, sonrio leve y tomo una bocanada de aire antes de adentrarme en esa burbuja en la que yo misma me encerré, esperando afrontar las consecuencias de esa pequeña escapada en la que fui inmensamente feliz.

Nicole: Aquí estoy

Darío: ¿Quien es ella?

Nicole: Es una amiga

Darío: Mala influencia dirás

Nicole: Una mala influencia que me hizo recordar lo que es vivir en apenas unas horas

Darío: No quiero que te siga frecuentando

Nicole: Eso no va a ser posible, buenas noches -salgo como puedo de mi habitación y persigo los acordes de la guitarra, hasta llegar a ese estudio con luces tenues y en el que se respira paz-

Karen: Ven aquí  -me abraza fuerte y besa mi frente dándome la luz verde para quebrarme en sus brazos-

Nicole: ¿Como cambian las cosas verdad? -sonrio entre el llanto- antes solías venir a mi llorando cuando se lastimaban tus rodillas, o cuando te rebasaba alguna situación y míranos ahora

Karen: ¿Que se le hace mi Nic? Te ha tocado confiar en tú hermanita menor -suelta una carcajada  y apoya su cabeza en mis piernas- ¿Sabes? No voy a preguntarte que es lo que sucede porque lo se todo, no creas que no te visto tocar fondo cada tarde en ese rincón del jardín

Nicole: Karen yo...

Karen: Tú después de mucho tiempo has vuelto a sonreír, te he visto correr de su mano como una niña pequeña y como se iluminan tus ojitos al estar con ella

Nicole: En apenas unas horas me tiene hecho un revoltijo de emociones -sonreí leve- creo que la estoy admirando demasiado

Karen: No es admiración, es algo más

Nicole: ¿Que?

Karen: Pronto lo descubrirás y no dejes escapar el motivo de tú sonrisa por alguien que solo te saca lágrimas -me hace lugar  entre sus brazos y me abraza hasta quedarnos dormidas-

Han pasado exactamente 2 meses que no se nada de aquella mujer que lleva en su sonrisa la vida misma, vuelvo cada tarde al mismo manzano donde la conocí con la esperanza de volverla a ver, pero en lugar de ella siempre aparece una rosa con una nota escrita a braille, dudo mucho que regrese. Mi matrimonio marcha bastante bien siempre y cuando no toque el tema “bebé”, por primera vez me decidí a hacer algo a espaldas de Darío, algo que puede traer a mi vida eso que tanto anhelo, espero las consecuencias no sean tan graves

Darío: ¿Amor sabes dónde dejé mi portafolios?

Nicole: Eh no, no -oculto lo que traigo en mis manos-

Darío: ¿Está todo bien? -se acerca a mi-

Nicole: Si, todo bien

Darío: Nicole no me engañas, a ver qué traes en las manos

Nicole: ¡No...aghh! -me lastimo un dedo con una de las agujas-

Darío: ¿Que se supone que hacías con un sobre de condones y agujas?

Nicole: Nada...

Darío: ¡Nicole responde! -los tira al suelo-

Nicole: ¡Lo mismo que hice con los que usamos recién, agujeros! -elevo la voz-

Darío: ¡Maldita sea esto no puede ser cierto, no carajo, no!

Nicole: ¿Por qué diablos te aborrece tanto la idea de tener un hijo conmigo? -ignora mi pregunta y siento el sonido de un blíster cada vez más próximo a mi-

Darío: Tómate esto

Nicole: ¿Que es?

Darío: Es la píldora de emergencia

Nicole: No lo haré

Darío: Tómatela o voy a tener que hacerlo a la fuerza

Nicole: No me hagas esto, por favor

Darío: Tómala Nicole, no lo hagas más difícil

Nicole: Esto no te lo voy a perdonar jamás -lo obedezco- listo, te puedes largar de mi habitación

Se marchó sin ofrecer tan solo una simple disculpa, repaso todo lo ocurrido y sin más me apoyo a uno de los barandales del balcón de mi habitación, dejando fluir mis lágrimas

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Se marchó sin ofrecer tan solo una simple disculpa, repaso todo lo ocurrido y sin más me apoyo a uno de los barandales del balcón de mi habitación, dejando fluir mis lágrimas. Tras varios minutos siento el aire escasear y esas manos que ya han secado mis lágrimas, aferrarse a mi cintura con delicadeza, mientras que esos suaves labios se posan sobre mi mejilla y una dulce voz se acerca a mi oído en un susurro...

Natalia: Natalia, soy Natalia -me pega más a su cuerpo y se deleita con mi aroma-

Nicole: Estás aquí -sollozo recargando mi cabeza en su hombro-

Natalia: Aquí estoy linda, todo va a estar bien -seca mis lágrimas-

Nicole: No me dejes sola otra vez

Natalia: No lo haré

Nicole: Por favor

Natalia: Ven aquí -me sostiene fuerte de la cintura y me sienta en uno de los barandales- respira hondo e intenta calmarte

Nicole: Mhm -ahogo un sollozo-

Natalia: Ahora dime algo, ¿Crees que eso es amor?

Nicole: Eso creo, solo no estamos de acuerdo en algunas cosas y...

Natalia: Y nada, eso no es amor, el amor no te lastima

Nicole: ¡¿Y que es el amor según tú, aparecer una vez cada dos meses, eso es amor?!

Natalia: Es cuidar el corazón de esa persona incluso más que a ti misma -se sentó en frente de mi, acorralándome contra la pared-

Nicole: Cuestión de piel... -me acerco lentamente buscando sus labios-

Natalia: Mhm -sonríe sobre mis labios y me atrae hacia su cuerpo-

Nicole: No se lo que pase después de esto, pero muero de ganas por hacerlo

Mis manos viajan a su antojo por su escultural cuerpo, acariciando cada centímetro hasta llegar a la nuca y atraer su rostro hacia mi, un jadeo de ambas murió en la complicidad de una sonrisa que con desenfreno unió nuestros labios...

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