Zutto || [ Siempre ]

• Siempre estuve apoyándote •

"Sólo un poco más... Solo necesito un poco más...

Sigamos juntos solo un poco más."

RADWIMPS.

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❀ ═══════ • Parte II • ═══════ ❀

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Primer año en la UA.

Sus cuerpos se movían en perfecta sincronía, el estilo de lucha que usaban era impecable; era como observar una danza coreografiada en lugar de un combate cuerpo a cuerpo. Los espectadores no cabían en su asombro, pero eso no les quitaba el entusiasmo de observar el magnífico encuentro del cual eran espectadores privilegiados.

Patada, bloqueo, puño derecho, esquivar, barrida de pies, voltereta hacia atrás, salto con patada descendente, bloqueo con los brazos en cruz, contrarrestar. Ataques, ataques y más ataques de las dos partes.

—¡No te atrevas a contenerte! —gritó Sakura a su adversario, aprovechando que habían tomado distancia para respirar e idear estrategias.

—Nunca fue una opción —respondió Enji. Ambos se sonrieron desafiantes y volvieron al combate.

El pelirrojo esta vez hizo uso de su peculiaridad, del mismo modo que Sakura con la suya, dejando atrás el combate de calentamiento.

Durante su entrenamiento con Enji, Sakura descubrió que su peculiaridad, que creía era de energía curativa, no se limitaba solamente a eso; podía utilizar su energía también para aumentar su fuerza física y velocidad. Tal como estaba haciendo en ese momento. Sin embargo, a pesar de la feroz pelea que le estaba dando a su amigo, como toda peculiaridad ésta tenía defectos: su resistencia, a la que también se le sumaba su inexperiencia al manipularla de esa forma.

Sakura dirigía la energía de su peculiaridad a las partes de su cuerpo que utilizaría para atacar o bloquear, de esa manera, contrarrestaba la fuerza física del Todoroki, quien era musculo puro gracias a su complexión. Curaba sus heridas de quemaduras cada vez que se separaban y tenía el tiempo suficiente para hacerlo, pero le resultaba difícil aún alternar de una habilidad a otra. Tenía un largo camino por recorrer si quería ser una buena heroína.

Por parte de Enji, aunque podía usar su fuego para atacar a distancia, su amiga peli-rosa era muy temeraria y le atacaba de frente buscando puntos donde saliera menos lastimada y pudiera asestarle un golpe. En esos momentos, Enji debía ser muy cauteloso ya que un golpe de Sakura podía romperle un hueso con suma facilidad o provocarle otras lesiones.

Ambos respiraban agitados, mas ninguno cedía en el encuentro. Su profesor había sido claro con el ejercicio: debían tener una mentalidad Plus Ultra y dar su mejor esfuerzo para superar sus límites, solo así avanzarían. Y eso estaban haciendo, dándolo todo. Aun si la ropa de gimnasia de Sakura estaba quemada en algunas partes, aun a pesar de sus quemaduras; aun si Enji comenzaba a sentir que su cuerpo comenzaba a sobrecalentarse, perdiendo poco a poco su libre movilidad, aun si su costado dolía como los mil demonios. Continuaban porque querían mejorar, porque querían demostrarle al otro que aún podían, porque se respetaban, admiraban y no querían quedarse atrás del otro.

El entrenamiento se había alargado más de lo conveniente, lo que comenzó a pasarle factura a Sakura. A pesar de que había mejorado de una manera abismal, no podía compararse con Enji; no con las complicaciones de su propia peculiaridad. Por ese motivo, ella se alejó del muchacho y observó a su maestro, quien entendió su mensaje al verla respirar de manera errática.