03-09

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Eran las siete y media pasada de la tarde del Miércoles tres de septiembre, me encontraba en mi academia de inglés, sentada al lado de mi compañera, Natalia, ambas interesadas en la explicación del trabajo que se encontraba en la pizarra.
.- Básicamente, tienen que hacer eso, no es nada nuevo, sólo tienen que prestar atención.- Dijo mi profesora Soledad amable.- ¡Y dejar su celular en la mesa, Fabiana! .- Dijo ella llamándome la atención por usar mi teléfono en clases.
.- Ya lo dejé, ya lo dejé. Perdón.- Dije riendo.
.- Mmm, si. Bueno, terminen que en diez minutos corregimos.- Dijo la profesora sentándose.
Comencé a realizar mi trabajo, bastante sencillo, ya era un tema dado y la verdad es que el inglés se me daba bien.
Me encontraba en la antepenúltima oración cuando siento mi celular vibrar, lo ignoro, pero luego empieza a vibrar dos, tres, cuatro y hasta diez veces más.
"Debe ser urgente" Pensé.
Tomo mi celular y lo desbloqueo. Levantó mi vista y veo que la profesora se retira del salón así abro mi WhattsApp sin preocupaciones. La conversación que más mensajes tengo es la Agustina, una amiga del colegio. Entro a esta conversación y el primer mensaje de ella es un audio. Espero a que se descargue y le doy play.
Cuando el audio terminó todo mi mundo empezó a dar vueltas, todo mi cuerpo quedó inmóvil, quería decir algo, moverme pero nada.
Aquél audio decía "Fabiana, Aldana está en coma, tuvo un accidente y si no despierta para las diez de la noche le desconectan el respirador."
Aldana era mi mejor amiga, de toda la vida.
.- Fabiana te voy a sacar ese celular eh.- Dijo Soledad entrando al aula.
.- Si, ya.- Dije en un susurro.
Vi mi celular y tenía fotos de muchos mensajes que decían a Aldana, mi mejor amiga, que ella era fuerte y saldría de esto.
Al levantar mi vista la profesora no estaba, de nuevo, tomé mi bolígrafo para terminar mi tarea.
No entendía que estaba pasando, no entendía como debía reaccionar ante esto. Y de repente, un nudo gigante se formó en mi garganta, mis ojos húmedos, se me cerró el estómago y fue en ese momento que la primer lágrima resbaló de mi mejilla al piso.
Luego de esta, otra y otra y otra más sin filtro alguno.
.- Fabi, Fabi, Fabi ¿Qué te pasa?.- Preguntó Natalia tomándome de los hombros.
.- Mi, mi amiga e-e-está en coma y si no despierta se va a morir.- Dije entré sollozos, tapando mi cara.
.- ¿Qué pasa acá?.- Reconocí la voz de la teacher. *Profesora en inglés*
.- No sé, dijo que su amiga está en coma y si no despierta ella va a.- Dijo sin pronunciar la palabra "morir".
.- Ay Fabi, tranquila mi vida, ¿Queres un vaso con agua?.- Preguntó Soledad mientras Natalia me consolaba.
Yo sólo asenti. No tenía voz. Me encontraba en ese incómodo momento en el que sabes que si sueltas una sola palabra explotaras en lágrimas. La verdad es que estaba haciendo mi mayor esfuerzo para llorar muy fuerte, estaba conteniendo mis lágrimas.
.- Toma.- Me dijo la profesora entrenándome el vaso. Lo bebí como sí nunca hubiera tomado agua en mi vida.
.- Le vamos a llamar a tu mamá ¿Sabes?.- Preguntó la profesora, me limité a asentir y sentarme.
.- Dice tu mami que está acá cerca así que llega enseguida.- Dijo la profesora.
Luego de cinco minutos con mis manos en mi cara y sollozando, llega mi mamá y puedo notar que ella tenía todo su maquillaje corrido. Me dediqué a mirarla y descifrar por qué lloraba pero ella me interrumpió.
.- ¿Vamos hija?.- Preguntó mi madre viéndome con dulzura. Asenti. La verdad es que no poseía la fuerza para hablar, lo cual era bastante raro en mi.
Junte mis cosas y salí del aula sollozando.
Corrí a los brazos de mi madre, la abracé y sentí como de a poco mis hombros comenzaban a humedecerse a causa del agua salada que salía de los ojos de mi madre.
.- Fuerzas Fabi.- Dijo mi profesora, lo que provocó que mi madre y yo nos separemos.
.- ¿Vamos?.- Preguntó mi madre al ver que ya no tenía fuerzas para nada.
.- Avisame cualquier cosa.- Habló la teacher.
Salimos del edificio y nos dirigimos al auto que estaba frente a la academia. Abro la puerta trasera del auto y me encuentro con mi hermana mayor, Florencia.
Subo a su lado e inmediatamente ella me abraza, lo cual logró que me desahogara sin límites. Mis lágrimas salían incontrolablemente, no tenía noción de cuando pararía, no quería hacerlo, quería llorar, gritar, golpear hasta el cansancio, hasta que toda la angustia que sentía en mí se fuera, cayera vencida ante mis ganas de que nada de esto no fuera real, mis ganas de que ella despertara, sonriera, cantara, bailara y me amara de la forma en la que yo lo hacía, que me abrazara, que me consolara, yo simplemente anhelaba que abriera sus ojos antes que el reloj marcara las 10:00 pm.
Luego de unos minutos de sollozos, por parte de mí madre, hermana y yo, hablé, con el último hilo de voz que tenía.
.- ¿Cómo te enteraste? .- Pregunté.
.- Yo estaba en la escuela, cuando la directora llama a mí y a tus ex maestras de 6to grado, nos dijo que Aldana está en coma, en el Hospital Alta Complejidad, me dijo a mí que podía acercarme al kiosko de los abuelos de Alda, sus padres no estaban pero un primo de ella sí y me dijo que te conoce. Me contó que ella el lunes al medio día, volvía de su casa a la de su abuela en moto con Agustina.- Agustina, hermana mayor de Aldana.- Y en uno de los semáforos de la Avenida 25 De Mayo, a Agustina le dio verde, cuando ella cruzaban, un auto pasó en rojo, provocando que empujara la parte trasera de la moto, donde estaba Aldana.- Dijo mi madre, intentando hablar con claridad. Cada una de sus palabras rompían los pedazos de corazón que me quedaban, destrozaban todo a su paso.
.- ¿Y pero qué? ¿Ya... ya murió?.- Dije lo ultimo casi en susurro, una gran catarata salió por cada uno de mis ojos.
.- No, pero.- Dijo mi madre con melancolía. Luego de su respuesta no dije nada, me cerré en mis pensamientos.
Me sentía completamente vacía, todos mis momentos que había compartido con aquella rubia se desvanecian en el aire.
Sabía que nada volvería a ser lo mismo, que yo no sería la misma sin mí compañera de travesuras. Tenía mis amigas pero nadie se podía comparar con ella, nadie estaba a su altura. Aldana era de esas personas que aparecen en tu vida para cambiartela y dejar una gran huella. Con ella podías hablar de todos los temas, política, amor, amistad, lealtad, religión, este último era un poco más complejo ya que ella era Evangélica, y yo Cristiana, religiones distintas, pero de todas formas ambas hablábamos de ello sin inconvenientes, no alcanzaba las horas del día para hablar de todo lo que queríamos hablar, el silencio no existía. Y ahora, es éso lo único que queda. Silencio. A pesar de el hecho de que no íbamos al mismo colegio, ambas intentábamos mantener nuestra amistad.
Algunos podrían decir que estaba exagerando, pero interiormente sabía que mi mejor amiga no saldría de esta, ella era muy fuerte pero ella era la persona más buena que jamás he conocido, estaba muy comprometida con la iglesia, sabía que siempre, por más dolor que cause, las personas más buenas se iban primero, Él las salvaba para privarlas del dolor y la injusticia que existe en la tierra.

Sin darme cuenta, ya habíamos llegado a mi casa. Bajé del auto secando mis lágrimas como pude. Al llegar a la puerta de mi casa encuentro a mi padre con su celular en mano y en el marco de la puerta.
.- Me tengo que ir de comisión, recién me llamaron...- Dijo mi padre y al ver mi cara reaccionó.- ¿Que pasa?.- Preguntó.
.- Aldana, está en coma, tuvo un accidente.- Resumió mi madre. Mi papá se acerca y me abraza, no supe que decir, aproveché el momento y respire con tranquilidad.
Cuando nos separamos, corrí al baño para lavarme la cara, respirar y tranquilizarme... No funcionó. Lave mi cara, y más lágrimas salieron, me senté en el suelo, recostada contra la pared.
Me hice "bolita" abrazando mis rodillas, llorando. No me interesaba si alguien me escuchaba.
.- Fabi, arriba, vamos a la pieza.- Dijo mi hermana, tomándome delicadamente del brazo, acepté y caminé hacia la habitación. Corrí hasta mi cama y me tiré sobre ella.

Luego de unos minutos intentando no llorar, tomé mi celular, tenía muchísimos mensajes, todos eran palabras hermosas pero no sabía que decir, todas mis respuestas eran un simple "Gracias" Estaba seca, no tenía más palabras en mi diccionario que "Gracias, yo también te quiero" mi cerebro se había cerrado en la idea de perder a mi hermana del alma.
El único mensaje que contesté bien, fue el de mi hermanas mayor, Fátima, ella curaba el primer año de su carrera universitaria y por cuestiones de comodidad vivía en la casa de mi abuela materna, Ana. Por lo tanto, no estaba conmigo en este momento.
Luego de contestar, deje mi celular y vi la hora, 9:30 pm, ¿Cómo es posible que el tiempo pase tan rápido? Lo único que necesitaba era tiempo. Y éste, se estaba acabando.
.- ¿Queres ir a comprar chocolate?.- Preguntó Flor.
.- Vamos.- Dije poniéndome de pie.
Al salir noté que las nubes estaban algo extrañas, decidí ignorarlas y seguir caminando.
Durante el camino mi hermana intento hacerme pensar en otra cosa.
Al salir del negocio con el chocolate en mano, destroce su envoltura para así devorarlo con todo.
.- Gracias.- Dije con la boca llena.
.- No hay problema.- Dijo Flor riendo al ver mis enormes mejillas llenas de chocolate.
Al llegar a casa, volví a mi cama y miré la hora en mí celular. Este marcaba las 9:45. Respire profundo y comencé a rezar. Pedir por ella, su familia, sus amigos, todos los que la querían.
.- Yo, yo sé que aveces no soy muy respetuosa con respecto a los santos y éso pero si soy creyente, creo que un Dios que todo lo puede, necesito que me muestres que es lo mejor que le puede pasar a ella. Que la va a hacer más feliz. Por más que duela, quiero su felicidad antes de la mía. Vos sabes cuánto la aprecio, sabes que es una hermana para mi, me va a doler, me vas a arrancar una parte de mi, pero prometeme que ella va a estar bien y yo prometo no enojarme ni nada, necesito lo mejor para ella.- Dije llorando con cada palabra, yo sabía que era lo mejor para ella, no quería admitirlo. La horrorosa idea de perder a mi otra mitad me atormentaba.
Decidí calmar mi dolor con música, tomé mis auriculares, los conecté a mi celular y Shawn Mendes comenzó a sonar. Intenté concentrarme en la letra de su canción pero me era imposible, más lágrimas comenzaban a salir. Luego de la tercera canción miro la hora de mi celular y este marcó las 9:59 pm. Lo miré por varios segundos, miraba la hora y la puerta, rogando que mi madre entrara y me dijera que todo está bien pero eso no sucedía, los segundos corrían, mi madre no daba noticias, lágrimas y lágrimas caían, hasta que todo mí cuerpo se detuvo, mi mente estaba en negro, mis estímulos no respondían.
Mi reloj marcó las 10:00 pm.

¡Espero les haya gustado! Besos.
Pd: No sé que carajos le pasa a mi wattpad y me desfigura la portada, para que la aprecien la puse como foto de multimedia. Gracias @DaSLVR por la hermosa portada, love you :')

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⏰ Última actualización: May 08, 2015 ⏰

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