Jennie es una humana tímida, torpe y algo insegura. Rosé es una vampira descarada, pervertida y sarcástica, y ambas tienen que convivir a diario.
Claro, solo que Jennie no sabe que su compañera de cuarto la quiere comer entera.
ADAPTACIÓN
⚠ La histo...
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La castaña entró y frunció su ceño cuando vio a su amiga pelinegra y a su amiga rubia reír en su intento de sala. ¿Qué estaba pasando?
"¿Hola?"
"¡Ah, Jennie, hola!" Jisoo saludó, viendo a su mejor amiga sentarse frente a ella casi dudosa. "Ayer unnie fue a llevarme algo que olvidé aquí y de paso, cuando tú dormías, fuimos a cenar, ¡es tan linda persona!"
Jennie frunció más su ceño, apoyándose en su pierna.
"Pero... esas cosas del vampiro..."
"¡Olvida eso! Resulta que a Rosé también le gusta el KookMin, y de paso, ¡el SaiDa! No sabía que era tan cool" Como si fuera algo obvio, la menor comenzó a bailar al mismo tiempo que comenzó a ver a sus mayores.
"Ah, ¿Pero, no recuerdas eso del vampiro?"
"Jennie, Rosé me transformó en uno" La mayor rió, mostrando los dientes.
"Ya entiendo, ayer Rosie te devolvió ese cuaderno que se te olvidó ahí, fue el cuaderno del KookMin, ¿Verdad? Se hicieron amigas por eso, no lo esperé" Las dos vampiras comenzaron a reír al mismo tiempo que la pelirroja las veía confundida, abultando sus labios.
"Tienes razón, fue por eso, Ninil, hice la cena, ¿Quieres ir a cambiarte para que cenemos las tres?" Asintió la nombrada, levantándose mientras se quitaba su camisa e iba a su cuarto, haciendo a Rosé relamer sus labios al ver su espalda. "Te dije que lo más gracioso de admitir que era una chupasangre es que Jennie es idiota, siempre encontrará una excusa para no creer"
"Jennie siempre ha sido así de idiota" Jisoo relamió sus labios. "La conozco desde que somos niñas"
"Hace tiempo que solo veo gente crecer" Admite triste.
Vivir tanto, ¿Para qué? Hasta hace años entendió el verdadero significado de la monotonía, la soledad y el saber que todas tus amistades iban a morir, por eso Rosé se hizo alguien solitaria y no se encariñaba con nadie, hasta que llegó Jennie. Frunció sus labios y se levantó, prendiendo el sartén para calentar la comida. Jisoo tuvo que retirarse, así que solo quedaron ellas dos, solo ellas dos.
Rosé veía la flama calentar la comida a través del metal, y recordó cómo llegó hasta eso. Automáticamente. Antes tenía que hacerse una fogata y tenerla prendida para seguir cocinando. Aunque tal vez eso era lo bueno de vivir por mucho tiempo. Ella ya había visto y vivido eso y lo recordaba, tal vez por eso siempre tenía calificaciones excelentes.
Probó de su comida, sonriendo, y volteó para ver a una Jennie con un rosario y un crucifijo, asustándola. Un crucifijo. Los ojos de Rosé se abrieron a medida que sentía debilitarse, llamando la atención de la menor.
"¿Te sientes bien?"
"¡Sí, perfecta, mejor que nunca! ¿Qué es eso y por qué está aquí?"
"Ah, olvidé que eres atea, mi mami me dio esto, hoy fui a visitarla, dijo que tenía que colgarlo en la pared si quería nuestro hogar bendecido" Tragó saliva, viendo la imagen del hombre crucificado con un gesto de dolor.
"¿Lo harás?"
Jennie alzó sus hombros.
"Tal vez solo los ponga cuando ella venga, no quiero incomodarte" Rosé asintió, sentándose en la barrita para ocultar su debilidad. Sonrió al recordar que la mamá iba cada venida de Cristo solo para llevar comida.
"¿Y cada cuándo vendrá?"
"Los viernes" Casi se cae, y abrió sus ojos.
"Qué pena que los viernes yo no estoy presente"
"Oh, ella dijo que quería verte y agradecerte por cuidar bien de mi y darte una bendición" Palideció aún más, y Jennie juró que su amiga se veía transparente. "¿No estás enferma?"
"¡Qué belleza una bendición me encantan las bendiciones fíjate que quiero una bendición ya! ¡Que me bendiga la vida y la vagina!" La menor abrió sus ojos, asustando a Rosé, y luego la miró.
"¿A tu vagina?"
"¡Mi pegatina!"
"¿Tu pegatina?"
"¡Mi vagina de Jesús Sunbaenim!" Jennie volvió a mirarla raro. "¡Pegatina, tengo una pegatina de Jesús Sunbaenim!"
"¿Dónde?"
"En una página" Tragó saliva después de decir dos veces una frase que tenía involucrado 'Vagina' y 'Jesús'
"¿Qué es esa página?"
"Mi página de religión"
"No llevamos religión" Entrecerró sus ojos, y la mayor sonrió incómoda.
"Soy católica en secreto"
"¿Estas segura que te sientes bien?"
"¡Sí, anda, come, yo tengo que ir a alabar a Jesús Sunbaenim!" Se fue a su cuarto aplaudiendo. "¡Alabaré Alabaré Alabaré~ Alabaré a mi señor~"
Y Jennie solo dejó su crucifijo por ahí, y agarró un plato para servirse.