Regreso a Casa

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Un nuevo semestre empezaba, Lena apenas si tenía dos días de haber llegado a la ciudad y aunque su niñez la había pasado aquí, se sentía algo fuera de lugar.

Tomó lo primero que encontró disponible, el fin de semana no tuvo la oportunidad de desempacar sus cosas, todo a causa de su hermano menor y su idea de ser Idol, había sido arrastrada a sus audiciones para cuidar de él, como si no fuera ya lo suficientemente grande.

Desayunó rápido y se dispuso a salir a la universidad...

-Nona, en la tarde puedes acompañarme a la televisora?-

*Por la tarde?, no estoy segura si estaré libre, aún no tengo mi horario*

-Pero, yo no puedo conducir hasta allá-

Puso ojos de gatito triste

*Basta!! sabes que esa cara es irresistible*

El chico puso una gran sonrisa en su cara

-Te veo en la tarde!-

*Está bien, nos vemos en la tarde*

Eli era todo un manipulador, su dulzura hacía imposible negarse a sus peticiones y él lo sabía, siempre que podía hacía uso de su encanto para obtener lo que quería.

Lena llego a la universidad y lo primero que le sucedió fue que la confundieron como alumna de nuevo ingreso, todos los clubs querían reclutarla; para ella era gracioso, tal vez resaltaba mucho su estilo de ropa o su larga cabellera roja que nadie creía que fuera natural, hasta que la veían con detenimiento y lograban ver que incluso sus pestañas y cejas eran bastante semejantes al tono de su cabello.

lena lucía casi exactamente como su madre Helena, la única diferencia entre ellas eran sus ojos, mientras su madre tenía ojos redondos, pequeños y profundos, Lena tenía unos ojos felinos color verde bastante grandes a comparación de otros

Al llegar a la sala de profesores, todas las miradas se posaron sobre ella...

Eres mi LunaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora