Snap shot

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El dedo se hunde, demasiado seco, demasiado profundo, pero es ese dolor que se dispara en la espalda de Kirishima lo que lo hace. La sensación de 'demasiado' se mezcla agradablemente con 'perfecto' y lo lleva al límite. Las bolas se contraen con fuerza, desbordándose cuando se corre con fuerza, salpicando el inodoro debajo de él, metiéndose solo parcialmente en el agua de la taza.

Bakugo lo folla a través de él, apuñalando una y otra vez su próstata hasta que prácticamente está arañando las paredes para que se detenga y, finalmente, es cuando golpea dentro una última vez para derramarse dentro de él. El semen blanco caliente llena a Kirishima, disparando profundamente dentro hasta que se siente usado e hinchado.

"Ahh, perfecto", arrulla Bakugo, frotándose la espalda mientras se retira lentamente mientras su pene comienza a ablandarse.

Él observa, mirando fijamente el borde hinchado e hinchado del culo de Kirishima, estirado para abrirse boquiabierto desde su polla. Toma unos segundos, el pequeño y lindo agujero se abre y se cierra cuando, finalmente, el semen nacarado comienza a deslizarse hacia afuera.

Bakugo pasa el pulgar por el goteo que crece lentamente, untándolo alrededor de su piel antes de abrir un poco más el agujero usado. "Sonríe para la cámara."

Kirishima se estremece debajo de él. La cámara hace clic, pero está más vacía y apagada que las demás. Bakugo maldice.

Deja ir a Kirishima, jugueteando rápidamente con la cámara desechable que no obedece y simplemente gime mientras trata de enrollar la película, la cámara objeta mientras Bakugo maldice más fuerte.

"¡Maldición!" sisea. "¡Qué estupidez  ya no hay  espacio en el carrete !"

Suena el anuncio y hay una pequeña parte de Kirishima que está increíblemente decepcionada por este hecho. Es como si toda la secuencia de fotos no estuviera completa ahora, incluso cuando siente lo asqueroso que ahora el semen se desliza por su grieta hacia sus muslos.

No puede creer que haya dejado que Bakugo, un prácticamente extraño, lo abrace en un baño público mientras uno de sus mejores amigos celebra su boda a unas paredes de distancia. Tampoco puede creer lo triste que se siente al saber que no habrá una foto de cremita  perfecto que le regalaron.

"Sabes", Kirishima se abre paso a través de la corriente de lenguaje soez que Bakugo está murmurando mientras casi rompe la cámara en dos en su frustración. "Creo que podría tener una cámara en mi casa".

Bakugo parpadea, mirando hacia arriba.

Kirishima está allí, todavía inclinado contra la pared, estirando la mano hacia atrás para pasar dos dedos por su raja, recolectando toda la esperma que pueda para volver a meterlo en su agujero, empujándolo tan profundo como puede alcanzar. Gime, extendiendo los dedos para mostrarle a Bakugo sus entrañas cremosas.

Kirishima se lame los labios. "Incluso podría tener una cámara de video también si tienes suerte".

Bakugo sonríe, ya metiendo su polla dentro de sus pantalones. "¿Solo si tengo suerte?"

Kirishima se encoge de hombros. "Solo los hombres que limpian los desastres que hicieron pueden averiguarlo".

Es una burla, una que Bakugo acepta fácilmente. Apenas deja que Kirishima se arregle los pantalones y la camisa antes de sacarlo del baño, arrastrándolo hacia el vestíbulo de recepción para agarrar sus cosas y llamar a un auto para que venga a recogerlas.

Solo cuando están agarrando chaquetas y teléfonos, el estúpido Deku muestra su rostro para detenerlos.

"¡Kacchan!" el llora. Ha bebido demasiado por el tono sonrosado de sus mejillas. "¿Ya te vas? ¡Ni siquiera estabas aquí cuando vinimos a saludarte!"

Bakugou frunce el ceño, sin importarle en absoluto ya que su pene aún está húmedo y deseando volver a entrar en ese cálido trasero de Kirishima lo antes posible. "Estaba ocupado haciendo cosas más importantes".

Deku parpadea. "Qué más importante--"

"¡Midoriya!" Kirishima interrumpe rápidamente, con el brazo envuelto alrededor de los hombros del nuevo esposo para darle un abrazo lateral. "La boda fue increíble, ¡ustedes dos se ven tan felices juntos!" Deku se ilumina de inmediato, incluso cuando Kirishima se aleja para poner su brazo alrededor de Bakugou. "¡Dale lo mejor a Ochako! ¡Era hermosa! Nos vamos ahora, se nos hace tarde, un poco cansados, ¡gracias de nuevo por invitarnos! ¡La pasamos muy bien!"

Kirishima tira y a Bakugou no le importa. Está seguro de que la pelirroja quiere marcharse cuanto antes porque la corrida se desliza por sus muslos.

Deku probablemente esté demasiado borracho para darse cuenta de que Bakugou y Kirishima no se juntaron. Está demasiado feliz para hacer mucho más que despedirlos cuando se van, tomados de la mano, rumbo al departamento de Kirishima, donde Bakugou tiene una comida completa esperándolo.

Kirishima se retuerce, tratando de evitar que se derrame la mayor cantidad posible de semen.

Bakugou no puede esperar.

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En la mesa, desatendida, luciendo inocente entre las copas de champán y los cubiertos, hay una pequeña cámara desechable. Sin pretensiones, olvidado y carrete  agotado.

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