MI AMOR POR SIEMPRE

🌤️ 5. LATELY

JungWon salió del cuarto de maquillaje, iría por un café, pero en su camino se topó con algo que no le gustó para nada; SuNoo estaba conversando cómodamente con un chico que en su opinión era muy guapo, no pudo evitar sentirse celoso, recordó que SuNoo le había dicho que él sí tenía una relación con alguien más. Su corazón dolió al recordar a ese chico como el mismo que estaba junto a SuNoo en el desfile cuando se reencontraron y al comprender que quizás ese chico era su nueva pareja. Él sabía que no debía hacerse ilusiones con el Alfa, pero cómo no ilusionarse si llevaban meses encontrándose en el cuarto de limpieza o a veces en otros lugares, compartiendo besos, caricias y todo su ser furtivamente, siempre siendo precavidos en cada momento para que nadie lo sepa. En estos meses, SuNoo nunca mencionó a su pareja, ni siquiera por accidente cuando estaban juntos.

El dolor en su corazón aumentó y sus ojos se cristalizaron cuando vio cómo ese chico acarició la mejilla de SuNoo y él sonrió muy bonito, no quiso seguir presenciando esa escena, así que se retiró, tratando de retener las lágrimas.

En un par de minutos, JungWon se encontraba en una mesa tomando un café, pudo controlar sus ganas de llorar, pero la desolación aún estaba presente en su alma.

— JungWon. — una voz sonó, captando inmediatamente la atención del Omega, porque esa voz la reconocería a mil kilómetros de distancia.

— SuNoo. — dijo JungWon, su voz sonando desganada.

— ¿Puedo acompañarte?. — preguntó y JungWon asintió.

— Sí, no hay problema. — sonrió levemente.

SuNoo se sentó en la silla frente a él, notando que se veía sin ánimos, además de percibir que su aroma tenía cierta agriedad. Al Alfa le gustaba verlo sonriendo y oler su aroma dulce, así que tuvo la idea perfecta para devolverle la sonrisa a su rostro y la dulzura a su aroma.

Inspeccionando el lugar para asegurarse de que nadie los viera irse, se levantó de su sitio, acercándose a JungWon.

— Ven conmigo. — dijo el Alfa, tomándolo del brazo, JungWon lo observó confundido.

— ¿A dónde?. — preguntó.

— Sólo, ven conmigo. — SuNoo dijo con súplica, JungWon se levantó de la silla y se dejó guiar por el Alfa.

Cuando se dio cuenta, ingresaron al estudio fotográfico, a esa hora estaba vacío, así que no tenían de qué preocuparse.

— ¿Qué hacemos aquí?. — JungWon preguntó intrigado.

— Serás mi modelo. — SuNoo respondió sonriente.

— ¿Es en serio o es una broma?. — JungWon rio divertido, sus hoyuelos resaltando en sus mejillas. — Yo no soy modelo, SuNoo, no lo soy.

— Eso ya lo sé y no importa, eres divino, tienes una personalidad asombrosa, una sonrisa encantadora y con esos preciosos hoyuelos eres el Omega perfecto al que quiero fotografiar. — con esas palabras lindas y sinceras fue imposible que JungWon no se sonrojara y que se sintiera aún más fascinado con ese hombre que alguna vez fue su Alfa.

— Pero... No sé cómo posar. — susurró el Omega, preocupado y emocionado a la vez.

SuNoo acercó su rostro al contrario y dijo:

— Sólo diviértete... — inhaló sutilmente el aroma de JungWon, dándose cuenta de que era dulce nuevamente. — Juega y haz lo que quieras con la cámara. — bajó su mirada hacia sus labios y depositó un pequeño beso en ellos para luego alejarse del Omega que sonreía. Y SuNoo también sonrió por haber logrado su cometido de verlo feliz.

En ese lugar sólo se escuchaban sus risas, estaban divirtiéndose tanto. JungWon posaba de varias maneras; desde la más tierna y serena, hasta la más sensual y provocativa, y a SuNoo le encantaban todas, JungWon se estaba convirtiendo en su modelo favorito. La felicidad era tanta, que sus aromas se intensificaron, mezclándose entre sí, haciendo la combinación perfecta.

Cuando la “sesión fotográfica” terminó, ambos se acercaron sonrientes.

— Me siento muy feliz. — JungWon habló, tomando las manos del Alfa entre las suyas. — Gracias, SuNoo, me divertí mucho.

— No tienes que agradecerme nada, yo de verdad tenía muchas ganas de tomarte fotos y también de verte feliz. — SuNoo soltó sus manos para después envolverlo en un cálido abrazo, el cual JungWon correspondió, rodeándole el torso, sin apartar sus miradas.

No podían olvidar el hecho de que estuvieron casados y que fueron Alfa y Omega. Su deseo de estar juntos despertó y ambos lo sintieron, así que sin más, acercaron sus rostros hasta juntar sus bocas, besándose con desenfreno, pero JungWon cortó el beso, desconcertando a SuNoo.

— ¿Qué pasa?. — cuestionó el Alfa angustiado.

— SuNoo, tú tienes pareja, me lo dijiste el día del desfile, pero con lo que ha estado pasando entre nosotros lo había olvidado o quizá yo no quería recordarlo, pero hoy te vi con el mismo chico de ese día y supuse que es él... ¿Es él tu actual pareja?. — JungWon preguntó temiendo de la respuesta, estaba seguro que lo destrozaría por completo, porque Últimamente sentía que su conexión con SuNoo se hacía cada día, más irrevocable.

— No hables de eso, ¿sí? No lo menciones. — SuNoo acarició su mejilla e intentó besarlo de nuevo, pero JungWon no se lo permitió.

— No, SuNoo, estás en una relación con él, le debes respeto. Nunca debimos ceder ante nuestros instintos ni iniciar con esto, no es correcto, tú debes estar con él, no conmigo, yo no...

No pudo continuar cuando SuNoo lo calló con un beso voraz, quitándole el aliento. No quería que siguiera hablando de un tema innecesario que no encajaba en ese momento. JungWon trató de no sucumbir ante el beso, pero falló en el intento.

Dejándose llevar por sus sentimientos, se convirtieron en uno solo, como siempre sucedía cada vez que se encontraban a solas.