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- Brian, yo...

- Hola chicos!! - Jhonny llegó con una botella de cerveza en la mano. - Quieren bailar un rato?

- Ahora no Jhonny - respondió Brian.

- Yo si! - Brian me miró sorprendido pero yo necesitaba escapar un momento de él, de esos ojos profundos, de esos brazos fuertes, de ese embriagante aroma... Ahora que lo pienso mejor... Por qué quiero escapar de todo eso?

Me levanté de allí para ir a bailar en la pista. La musica era algo lenta y sensual, me incomodaba un poco bailar este tipo de música, pensé en sentarme de nuevo pero vi a Brian hablando muy animado con una chica de cabello negro. De pronto su mirada se cruzó con la mía.

- Ahora sí te vas a enterar, Haner. - dije para mis adentros.

Empecé a bailar de una manera tan provocativa que yo misma me sorprendí. Yo nunca había bailado así, ahora lo estaba haciendo y todo era por Brian? Era para que él me viera?

Volví a mirar hacia el lugar en que estaba Haner pero no pude localizarlo, genial, seguro me veía como una ridícula y Brian ni siquiera se quedó a verme. De pronto unas manos que ya conocía se pusieron sobre mis caderas y el perfume que sólo el podía tener estaba llenando mis fosas nasales.

- Crees que vas a bailarme de esa manera sin tener consecuencias? - mi cuerpo entero se estremeció ante sus palabras, cada pequeña parte de esa frase golpeaba mi oído y llegaba a cada rincón de mi cuerpo.

- Y q-qué piensas h-hacer? - su simple pregunta me puso tan nerviosa que se me cortaba la voz.

- Oh, creeme, pequeña... No puedo decirte lo que pienso hacer - me giró haciendo que nuestros rostros quedaran a escasos centímetros - o al menos no en un lugar público.

- Una oportunidad? - le pregunté enlazando mis manos en su nuca - Sólo eso?

- Por qué lo preguntas?

- Porque me estás convenciendo de darte muchas más...

- Parece que haberme ido ha sido la peor decisión que he tomado en mi vida. - se acercó aún más a mí, haciéndome sentir su fresco aliento en mis mejillas.

- Y el volver... Ha sido la mejor decisión que has tomado hasta ahora... - quise besarlo pero me detuvo.

- No hasta ahora... Hasta que te pida ser mi esposa - abrí los ojos como si fueran a salirse de las órbitas y justo en ese momento unió sus labios a los míos.

Tal vez ser su esposa no sería tan malo... O si?

**

Desperté en un cuarto que ciertamente no es mío. Revisé que aún tuviera toda mi ropa en su respectivo lugar y miré a todos lados tratando de encontrar a quien me trajo aquí.

- Buen día, bella durmiente. - Brian entró a la habitación con una charola en las manos.

- Puedes decirme qué hago aquí? - crucé los brazos sobre mi pecho esperando una respuesta de su parte.

- Al menos vas a desayunar? - sonrió de lado - mira que yo mismo lo preparé y sería una lástima desperdiciar un delicioso desayuno como este...

- Bien... Pero luego me explicas todo. - Brian puso la charola sobre mis piernas. En esta había una taza con cereales, una botella de leche y un... Pastelillo? - Dijiste que habías preparado todo esto... Verdad?

- Así es. - No pude evitar reír a carcajadas - Qué es tan gracioso?

- Tú... Hiciste el pastelillo?

- Pues... Pues sí.

- Eso no te lo creo.

- Y desde cuando los tipos rudos no pueden preparar pastelillos?

- Ok, si tu lo dices... - empecé a comer el dichoso desayuno que Brian dijo haber preparado - Ahora si, dime cómo llegué aquí.

- Pues, estábamos bailando y me dijiste que te hiciera el amor.

- QUÉ?! ESO DIJE?!!

- Pues... No exactamente... Pero si lo pensaste o niega que si quiera lo estabas considerando.

Sinceramente, sí lo había pensado... Sólo que no podía decírselo a Brian. Así que me llené la boca con el pastelillo... Que por cierto sabía muy bien.

- Lo sabía! - sonrió victorioso - Yo no soy del tipo fácil. - empezó a reír mientras yo trataba de no ahogarme con lo que estaba comiendo - Pero la verdad es que nos sentamos a hablar y de un momento a otro te quedaste dormida sobre mi hombro.

- Y sólo me trajiste aquí?! Mi hermano debió impedírtelo!

- Pero no lo hizo, porque su atención estaba en una rubia... Y se veía muy bien la chica... - lo golpeé en el pecho - Ok ya, no te enfades... Pero Zacky fue quien me pidió traerte.

- En serio?

- Si. Yo creo que quería cogerse a la chica en tu cuarto...

- Que asco!! - le lancé los cereales en la cara.

- No te vuelvo a preparar nada! Y mucho menos a traértelo hasta la cama.

- Me voy a duchar. - quité la charola que tenía sobre las piernas para poder levantarme.

- Quieres que vayamos a la ducha juntos?

- Claro que no! - antes de darme cuenta, Brian se había lanzado sobre mí, presionaba mis muñecas contra la cama y su entrepierna estaba justo sobre mi cintura. Era una bonita vista desde mi lugar.

- Entonces... Te quedas otro rato aquí.

- J-justo aquí?

- Justo aquí.

Crimson Day [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora