01

1.2K 136 19
                                    

—YoonGi.

YoonGi elevó la mirada, encontrándose con la dulce mirada de Marina. Su mejor amiga que, al ser hija de una coreana y un australiano tenía unos rasgos mestizos únicos que harian ver a cualquiera en su dirección. Y claramente el no era la excepción.

—¿Dime?

—Yo... —La chica bajó la mirada y entrelazo sus manos entre sí en señal de nerviosismo —.Tengo algo que decirte.

—¿Qué cosa? —Preguntó YoonGi, comenzando a preocuparse —. ¿Paso algo malo?

Ella negó.

—No, no es eso.

—¿Entonces que es?

—Yoon... Estoy saliendo con alguien.

YoonGi parpadeo, confundido. Ladeo su cabeza y luego respondió:

—Eso está bien, supongo.

—No. No lo está.

—¿No?

—¡NO!

—Ah...

—¿Y sabes por qué? —Cuestionó ella.

—La verdad es que no.

—Porque es mayor que yo.

—Oh bueno, dicen que para el amor no hay e...

—Veinte años mayor.

—De acuerdo, eso sí es malo. —Admitió YoonGi.

—Y eso no es lo peor. —Dijo la chica en un suspiro.

—¿Hay más?

—Pero no es tan malo...

—Es casado. —Dijo YoonGi, rodando los ojos mientras la veía fijamente con una mano en la cintura.

—No.

—Es matón.

—¡NO!

—¿Millonario?

—Ojala. —Comentó la chica con pena.

—¿Es un backstreet boy?

—No me gustan los gringos. De todos modos no creo que me hubiera hecho caso.

—Todo puede pasar.

—No se ingles.

—Pero puedes aprender.

—No es un famoso, YoonGi. —Soltó la chica, sonando exasperada.

—¿Entonces?, solo dilo. Como la haces de emoción.

—Es el mejor amigo de mi madre.

—¿Y eso que tiene que...

—Y estoy embarazada.

—¿Qué?, no inventes Marina, apenas tenemos dieciséis.

—Por eso dije que era complicado.

—Es ilegal.

—Tambien. —La chica estuvo de acuerdo —. ¿Qué voy a hacer?

—¿Él sabe?

Ella negó.

—¿Qué me aconsejas que haga?

—No se, jamás me he embarazado. En todo caso, no es posible que me pase alguna vez, así que no creo que mis consejos ayuden demasiado.

—Es verdad.

—Creo que solo queda algo por hacer. —Dijo YoonGi con determinación.

—¿Buscar en Internet?

YoonGi parpadeó.

—Iba a decir que le dijeras al hombre sobre tu estado y exigirle que se haga responsable.

—Oh...

—Pero tu idea suena mejor. —Finalizó YoonGi con una sonrisa. —Hagamos eso entonces.

La chica vio la sonrisa en el rostro de su amigo y sonrió de igual manera antes de abrazarse de su cintura y dejar un beso en su mejilla.

—Gracias por ayudarme y estar siempre para mí.

—Tienes suerte de que te quiera. No cualquiera te soportaría.

La chica se rio antes de apretar una de sus mejillas con fuerza, sacándole un jadeo de dolor.

—Yo también te amo, idiota.

YoonGi asintió en respuesta.

















El Hijo De Mi Esposa ||Taegi Donde viven las historias. Descúbrelo ahora