Bad boy down ϟ Yoonmin

Who dat, who dat, who dat boy?

"El resultado es siempre el mismo,
¿Ves? Gané de nuevo
No vengas tan fácilmente
No es divertido, ahora tú,
No puedes escapar 
Es muy fácil, chico malo, ríndete..."—Bad boy- Red Velvet

—No quiero herir tus sentimientos Jimin pero lo que quieres es imposible...—Taehyung observó a su amigo, y es que realmente estaba loco.—Hay cero posibilidades de que él se fije en ti.

Jimin frunció el ceño, las palabras de su mejor amigo tal vez lo molestaron un poco, ¿Cómo podía asegurar eso? Si algo lo caracterizaba era su dedicación, si se proponía algo hacía hasta lo imposible para lograrlo y esto no sería la excepción.

—Taehyung, no puedes simplemente asegurar algo si Jimin ni siquiera lo ha intentado.—Hoseok salió en defensa del rubio.—Ok... tal vez suena un poco, uh, difícil pero no imposible.—Jimin pasó de sonreía a mirar feo a su amigo.—¡No quise decir eso! Es decir, Jimin, sé que te gusta pero solo míralo.

Él y sus amigos enfocaron a la persona por la cual discuten. Estaba sentado a varias mesas de la suya, Jimin ya conocía el lugar donde se establecía, en sí sabía muchas cosas sobre él y no es para menos, Park Jimin estaba —literalmente— loco por ese chico.

Min Yoongi, es un par de años mayor, cabello rubio —más rubio que el suyo—, siempre vistiendo con ropas adecuadas, Jimin amaba su estilo simple pero elegante, adoraba como lucía increíblemente sexy en un par de vaqueros negros desgastados, una camisa negra y toda esa aura misteriosa. Y ese par de ojos marrones, Jimin deseaba poder verlos de cerca, descifrar cada enigma que estos transmiten y deseaba tan mal que Yoongi lo viera, deseaba tener la mirada de Min sobre él aunque sea por minutos.

Se aferraba a la idea de que Yoongi aparentaba muchas cosas, podía aparentar ser un chico malo, había escuchado tantos rumores acerca de lo peligroso que Yoongi podía ser pero Park los descartaba, o tal vez es eso era lo que le atraía de él, ese lado que gritaba peligro que lo atraía como un imán al metal. O tal vez era el querer descubrir y demostrarle a todos que Yoongi no era como todos decían, no era un fuckboy, no era un tipo que iba golpeando a quien se le atravesara en el camino y por supuesto que no era un tipo sin sentimientos, ¡Se negaba a creerlo!

—Es solo el capricho de Jimin, hyung en serio, una vez que Min lo rechace lo odiará y al fin nos olvidaremos de "Yoongi hyung no es lo que parece" y todos los "Él es una buena persona".

—¿Por qué eres tan cruel? ¿Podrías al menos esperar a me vaya para hablar de esa forma? Por Dios, Taehyung.—Jimin intentó no sonar molesto pero vamos, su amigo ya aseguraba que Min lo rechazaría y él no podía aceptar eso.—Te voy a demostrar que Yoongi es una buena persona y que puedo conquistarlo.

—Jimin, a mi no me tienes que demostrar nada.—El castaño suspiró un poco frustrado, sabía que sus palabras herían un poco a su amigo pero él no quería que Jimin sufriera.—Solamente no quiero que te lastime.

—No lo hará.—Jimin miró a sus amigos y pudo ver la duda y la incertidumbre en sus rostros.—Suficiente, me voy.—El rubio tomó rápidamente sus cosas, sí, era un terco y sabía perfectamente que sus amigos solo se preocupaban por él.

—Jiminie...—Hobi intentó detenerlo, sin embargo Park ya había planeado algo y no iba a dar vuelta atrás.

—Olvídalo hyung, cuando a Jimin se le mete una idea en la cabeza o peor aún, cuando le gusta alguien de verdad, no hay quien lo detenga.

Ambos chicos observaron como Jimin salía del comedor hecho una furia. Ellos solo esperaban que de verdad no saliera herido, apreciaban a Jimin —así fuera un testarudo— pero sobre todo, no querían que su amigo sufriera por amor, y menos por ese chico, por Min Yoongi.