l i p s - Michaeng

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No quería apresurarme, pero las cosas estaban pasando por si solas, como si mis experiencias fueran una lección a la que realmente debía hacer frente.

Jooheon se acercó varias veces a mí, no lo ignoré pero traté de rechazarlo con amabilidad porque el recuerdo de su beso no era exactamente lo mejor que me había pasado en la vida.

De todos modos, esperé dos semanas para terminar de procesar todo y así tener en mente correctamente los labios de Yoo Jeongyeon; una chica misteriosa y dueña de una belleza destacable e inigualable, por eso mismo era deseada por prácticamente toda la preparatoria.

Desde los pies a la cabeza su estilo gritaba "Girl Crush" y por supuesto, para qué hablar de sus labios, algo que fácilmente se podría convertir en una fascinación. Eran de color durazno, el labio superior y el inferior eran carnosos pero no al punto de ser exagerados, se veían realmente deseables, tal vez los míos podrían encajar bien con los de ella.

Ni siquiera fué necesario hacer mucho para conseguir lo que quería. Me distraje leyendo un libro, tanto que cuando tocaron el timbre ya era muy tarde, así que no entré a clases, caminé por el pasillo y coincidentemente encontré a Yoo en una banca tomando una bebida energética.

Solo me senté a su lado fingiendo no saber que estaba ahí y fijé mi atención en la pantalla de mi celular.

—Son Chaeyoung... Aunque no luces como nerd, creí que eras de esas estudiantes responsables que no se podía perder una clase

Inconscientemente sonreí ante su voz un tanto grave pero femenina.

—Yoo Jeongyeon... Creí que eras una chica mala que prefería fumar en los baños en lugar de beber bebidas energéticas en un pasillo alejado de todo... Ya ves que las apariencias engañan

Me giré un poco hacia ella y como de costumbre analicé su rostro.

—Buena respuesta, ¿qué más tienes para decir?

—Mis labios pueden pronunciar muchas cosas pero tal vez no sean tan útiles ahora

—¿No? Yo los veo capaces de hacer algo útil

—¿Algo... Como qué?

Casi por inercia mis ojos fueron a sus lindos labios. Se acercó lentamente y pude saber que estos eran suaves pero había algo dulce en ellos, además de su temperatura fría que de seguro era un rastro de la bebida energética. La sensación era agradable pero no me hacía perder la cordura o algo así, me asusté un poco en el momento en que su lengua se deslizó por mi labio inferior y entró en mi cavidad bucal para chocar con la mía. Todo se arruinó en ese momento. Tuve que separarme, permanecí en el lugar mirando al suelo y repitiendo el suceso en mi mente.

El final no me había gustado para nada.

—Lo siento, tal vez fuí demasiado rápido... Pero tus labios en definitiva son irresistibles... Como sea Chaeyoung, búscame cuando quieras

Después de decir eso, se levantó y la ví irse. Ella era muy cool y después de todo bastante amable y por alguna razón sabía que la escena del beso no sería expuesta por ella así que me sentí más tranquila.

Así pasé mi tiempo procesando el nuevo beso.

Y aunque no estaba preparada, la semana siguiente en una forma fría y estúpida de decir "maté dos pájaros de un tiro". Dahyun y Tzuyu, me convencieron para asistir a una fiesta, aunque antes de eso, para ir a casa tuve que pasar por el lado del grupo de Lalisa Manobal, un chica linda, rebelde y con mucho flow que además de asistir a la misma preparatoria vivía cerca.

Sus carnosos y rojos labios, no eran fácil de ignorar, sexys era la palabra perfecta para describirlos.

Ciertamente no lo esperaba pero de un momento a otro ella me llamó con un silbido, no iba simplemente a caer por ella por lo que seguí caminando.

—¡Oye!, Pequeña... ¿Eres sorda?

Caminó detrás de mí, me detuve y me giré en su dirección pero preferí mirar mis uñas pretendiendo que no había interés.

—No, pero ese no es mi nombre Manobal y no soy un perro para que me andes silbando

—wow, así que también tienes carácter Son

Mi intento por no mirarla se desvaneció pero obligué a mis ojos a vagar por ella para no llegar a sus labios.

—Ves, tan fácil era por lo menos decir mi apellido

Se rio como si yo hubiera dicho lo más gracioso de la vida pero igual me pareció algo encantador de su parte.

—¿Vas a la fiesta de Vernon?

—Tal vez

—Te llevamos

Señaló su Jeep tan rojo como sus labios y con solo ese pensamiento quise besarla de una vez.

—Sí, la única boba con uniforme, sería raro

Una de sus cejas se curvo y una sonrisa traviesa nació en su rostro.

—¿No te gusta ser el centro de atención? Porque últimamente muchas personas hablan de tí. Joohoney no deja de presumir que te besó y hay algunos rumores que dicen que la mismísima Yoo Jeongyeon te besó... Así que pensé ¿Qué tan bueno podría ser?

Tal vez la adrenalina de estar a segundos de conseguir un beso me hacía dejar la vergüenza atrás porque solo por un beso me volvía valiente, impulsiva y coqueta.

—¿Qué? ¿Quieres intentarlo?

—¿Me estás provocando?

Entonces la miré fijo, no pude evitar lamer mis labios mientras ella los miraba con detenimiento y como siempre me perdí en unos labios, en esta ocasión los de Lalisa Manobal.

Me acerqué un poco de una forma desafiante, volví a mirar sus ojos y eso fué suficiente para que agarrara mi cintura y me atrajera a ella para estampar sus labios contra los míos. Ni siquiera pude detallar nada, fué extremadamente rápido y un tanto salvaje aunque no dejó de ser suave y a diferencia de Jeongyeon que intentó acercarse con precaución, ella invadió mi boca con su lengua sin aviso, el contacto era demasiado para mí, me separé rápido y me fuí corriendo.

Ya no tenía ganas de ir a ningún lado pero mis amigas llegaron, me hicieron prepararme, me arrastraron y me subieron al auto. Ni siquiera había empezado la fiesta pero ya había un ambiente divertido.

Conversé un rato con las chicas para alejar algunos recuerdos y cuando fuí a la cocina para buscar algo sin alcohol me acorralaron.

—Así que la chica de encantadores besos está aquí

Hansol Vernon Crew probablemente el chico más popular de la preparatoria, tenía una expresión sería y muy seductora, meses atrás nunca habría pensado que él podría estar hablándome con esos delgados labios con un perfecto arco de cupido. No dije nada, tan solo lo miré a los ojos y luego bajé a sus labios.

Como si esa acción hubiese sido suficiente para lograr algo, terminó de acercarse a mí y atacó mis labios. Los suyos estaban un poco resecos, todo era tosco y la lengua no pudo faltar. Estoy segura de que fueron solo segundos porque no pude resistir todo lo que estaba sucediendo, mucho menos el ligero rastro de alcohol en su boca.

Lo empujé y me escapé, mi estómago se revolvió pero no de una forma agradable. Estaba realmente frustrada, tal vez el beso de Lisa y Vernon juntos habían tenido demasiada intensidad, esa era mi única respuesta en ese momento en el cual ni siquiera pude mantenerme en la fiesta porque me sentía muy mal.

En mi casa, estando más tranquila y relajada, lo supe, podía ser obvio pero los besos eran una representación más de como era una persona en realidad. Había elegido mal, no fué porque tenía una personalidad cool, porque tenían flow o porque eran populares, simplemente sus labios llamaron mi atención ¿Había sido muy superficial?

Al parecer el beso con Vernon fué algo impactante para todo el mundo, pronto los rumores de que yo besaba bien se propagaron, me escapé varias veces y me obligué a estar más atenta que nunca para que no me robaran un beso. Era horrible, ya no quería besar a nadie más en la vida... Bueno tal vez a una sola persona, pero era casi seguro que ella ya no me besaría.