Mortal United (Unidad Mortal) ✔️ [Revenger #1]

(6) ¤ Bienvenido ¤

¤ 6 ¤

¤ Leonardo ¤

Perdí la huella camino de regreso a casa del señor Gump. Estaba herido, cansado, me moría de sed y mi respiración era un desastre.

Mi mente sólo pudo recordar todo lo que pasó en la prueba. La mortalidad de cada nivel, el ambiente deprimente que quedaba y las muchas vidas que se apagáron. Solar, ese chico Hermes y yo fuimos personas con buena suerte, valentía y astucia para salír con vida de ese lugar.

¿Me pregunto en donde estarán ahora mismo?.

Estaba tan metido en mi mente que no me había dado cuenta que estaba anocheciendo. Y a unos cuantos metros pude ver la casa del señor Gump.

Adelante el paso y vi que el señor Gump estaba sacando las cosas de su casa. Sus muebles, mesas, sillas, cajas, todo. Al parecer, estaba limpiando la casa. Puso unas dos cajas en el suelo cuando levantó la cabeza y su mirada conectó con la mía. Su asombro era como si se le hubiera aparecido un ángel frente a el.

-- ¿Leo? -- preguntó incrédulo acercándose a mi. Lo miré con una sonrisa en mis labios.

Lágrimas se formaron en mis ojos pero no las dejé salír. El señor Gump se acercó a mi rápidamente recibiéndome con un abrazo firme.

-- Cumplí con lo que me dijo señor. -- dije correspondiendo al abrazo.

-- Nunca creí que morirías... -- habló el señor Gump. -- pero mi fe nunca se apagó.

-- Estoy vivo señor Gump, le cumplí con lo que prometí -- dije en un sollozo aferrandome más al señor Gump. Mis lágrimas comenzaron a caer por mis mejillas.

-- Bienvenido a casa... hijo.

Se me vino a la mente la voz de mi padre al escuchar al señor Gump escuchar eso en el tono tranquilo en el que lo dijo, me hizo sentir algo fuerte en mi pecho y salieran más lágrimas de mis ojos.

Papá.

Rompí en llanto abrazado al señor Gump de por fín volver al calor de su hogar.

....

Ayudé al señor Gump con la limpieza de la casa. Saqué uno que otro mueble, silla, cuadro, etc para comenzar a limpiarles el polvo. El señor Gump terminó de sacar algunas cajas que dentro tenían mis pertenencias.

-- ¿Quien es este niño?.

Preguntó el señor Gump. Había sacado de la caja un marco con una foto vieja en donde salían dos niños.

Uno tenía un par de anteojos, el otro no sé podía ver su rostro porque la foto estaba rota, le faltaba un pedazo y ese pedazo era la cabeza con el rostro del otro niño.

-- Ese era mi padre cuando era niño. -- respondí viendo la foto.

-- La foto está rota. -- dijo viendo la foto -- falta la cabeza del otro niño.

-- No sé, estaba rota cuando la encontré.

-- ¿Y quién era ese niño?.

-- Mi padre me dijo que era su hermano.

-- ¿Osea tu tío? -- el señor Gump volteó a mirarme y yo asentí.

-- Si, pero nunca lo conocí.

-- ¿Por qué?

-- Papá me contó que cuando eran adolescentes su hermano desapareció -- expliqué desvíando la mirada a otro lado -- El creyó que había escapado o que fue secuestrado.

-- ¿Secuestrado?

-- Bueno, eso es lo que el pensaba que pudo haberle pasado -- dije pasando mi mano por mi cuello.