Todo salió mal

422 44 2
                                    

Avían pasado días desde que Tepeyollotl intento decirle palabras bonitas a Brunilda, ahora Tepeyollotl y Quetzalcóatl se encontraban en Tlalocan ya que decidieron pedirle ayuda a Tláloc con su siguiente movimiento de conquista.

Quetzal: Tepeyollotl tienes que ponerte pilas ya que tienes a Hermes y a Buda como rivales amorosos

Tepeyollotl: Ya lo sé

Tláloc: Hey anímate, ya veras que si lograras conquistarla

Menciono Tláloc intentando animar al dios de las montañas y honestamente estaba funcionando hasta que Quetzalcóatl dijo.  

Quetzal: Pero... aún no puedo creer que arruinaras unas palabras bonitas

Tepeyollotl: Es que... es que... me puse nervioso

Intento justificarse Tepeyollotl, pero Quetzalcóatl hizo oídos sordos ante las palabras de su amigo, Tláloc al notar que Quetzalcóatl estaba haciendo sentir mal a Tepeyollotl decidió intervenir preguntando. 

Tláloc: Entonces ¿Qué haremos ahora?

Quetzal: Ja pobres novatos, en lo que ustedes van yo ya volví

Tláloc: ¿A qué te refieres?

Quetzal: Por fortuna tengo un plan B

Tepeyollotl y Tláloc solamente se miraron sin comprender a que se refería el dios del viento, pero repentinamente Quetzalcóatl tomo a ambos dioses del brazo y lo llevo a rastras a un bosque, al llegar al bosque Tláloc se soltó bruscamente del agarre de Quetzalcóatl, por otro lado Tepeyollotl dio una mirada interrogante a su alrededor, la duda que cargaban ambos dioses solamente incremento al ver qué en ese bosque se encontraba Huitzilopochtli entrenando.

Tláloc: Quetzalcóatl ¿Qué hacemos en este lugar?

Tepeyollotl: ¿Por qué nos trajiste aquí?

Quetzal: Ustedes solamente observen y aprendan 

Después de decir esto Quetzalcóatl se acerco a Huitzilopochtli y amistosamente le dijo.

Quetzal: Oye Huitzilopochtli

Huitzilopochtli: ¿Necesitas otra iguana?

Quetzal: No en realidad, solo quería preguntarte qué si hipotéticamente tu te enamoraras de alguien... ¿Qué arias para enamorar a esa persona?

Huitzilopochtli: mmm... supongo que ganaría una guerra para demostrarle mi fuerza y tal vez después casaría un venado para dárselo como muestra de mi amor

Quetzal: ¿Okey? gracias por tu tiempo

Quetzalcóatl no dejo que Huitzilopochtli contestará ya que tan rápido como llego se fue, ya estando lejos del lugar Quetzalcóatl miro a ambos dioses que estaban de espectadores y les dijo.

Quetzal: Ignoraremos lo que dijo Huitzilopochtli

Tláloc: Si tú lo dices... 

Tepeyollotl: Entonces que prosigue

Quetzal: Oh jo jo para tu suerte ya tenia un plan E

Tepeyollotl: ¿Plan E? no seria plan C al que te refieres

Quetzal: No, es plan E de "éxito"

Tepeyollotl: Está bien... y cuál es tu brillante plan

Quetzal: Es sencillo, solamente iremos con Tezcatlipoca

Quetzalcóatl hizo una pausa dramática intentando meterle suspenso a su brillante e infalible plan, por otro lado Tláloc presentía que tiempos malos se avecinaban. 

Las locuras de Quetzalcóatl en el ValhalaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora