Amor Con Olor A Lluvia - 花束 [ ᴍᴀɴᴊɪʀᴏ x ʟᴇᴄᴛᴏʀᴀ ]

✦ Prólogo

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Mei

La pequeña se había alejado del campamento después de haber cantado mal un coro de una canción que sus compañeros e instructora, cantaban.

Todos se habían burlado de ella, quién llorando, se adentró en el bosque.

Por supuesto que nadie la había seguido.

Solo era la niña que siempre exageraba las cosas.

Eso es lo que pensaban de ella.

Dio una patada a una piedra que salió volando unos cuantos metros, ella corrió hacía donde había caído, para volver a patearla.

Pero...

Esta había caído justo a lado de unos zapatos negros quién lo ocupaba un...

La pequeña niña quedó ensimismada al ver al hombre que estaba enfrente de ella.

Era un hombre peliblanco, con la piel pálida y, unas muy notorias ojeras.

Hubo cinco minutos de silencio absoluto en los que tanto la pequeña como el hombre que estaba justo al frente, se miraban con los ojos abiertos de par en par.

Lágrimas comenzaron a correr en las mejillas del hombre. Estaba llorando.

La pequeña lo observaba con una cierta lástima en la mirada.

Aquel hombre debió haber pasado por mucho sufrimiento, y la pequeña podía notarlo.

Inconscientemente se vio a ella misma acercarse a él y tomarlo de la mano.

El hombre estaba sorprendido, las lágrimas dejaron de salir de sus ojos. Pasó una mano por sus mejillas, secandolas.

Está vez tenía una mirada mucho más suave, tenía las mejillas ligeramente sonrojadas.

Dirigió su mirada por detrás de él, mirando un lugar en concreto.

—¿Ambos reencarnaremos? —preguntó al vacío.

La pequeña pudo notar que el hombre tenía un tatuaje en la nuca.

Volteó a ver hacía el lugar que él observaba pero... no había nada.

Volvió a mirar al hombre, quién en un ligero momento, se había puesto de rodillas justo al frente de ella.

—En el futuro, si por algún milagro las circunstancias te permiten casarte con alguien... casate conmigo.

Las palabras del hombre eran como una dulce y sincera melodía.

Ella parpadeó confundida -con las mejillas sonrojadas-.

Por unos breves minutos de silencio.

Se encontró a ella misma asintiendo alegramente.