Dualidad - Mia (JJk Completa)

Despedida de soltera

Habemus cancion!!!! Y sabemos que significa la cancion en un capitulo.

Seoyun.

No entiendo cómo me deje convencer, más bien no entiendo cómo es que Jungkook me dejo hacer esto, yo solo quería una cena sencilla con Jinri, algo simple, no soy de las que vaya a este tipo de lugares.

—Te voy a poner una venda.

—Jinri, en verdad no pienso dejarme manosear por hombres llenos de aceite y semidesnudos.

—Como tu madrina es mi deber hacer una despedida de soltera memorable, además cuando estabas con Yoon no me dejaste, así que esta es la primera y estoy emocionada.

—¿Cómo convenciste a Namjoon de esto?

—Sabe que si no me da lo que quiero habrá drama, además el embarazo lo vuelve más complaciente.

Suspire resignada a mi destino, Jinri me coloco la venda no pienso moverla de su lugar porque si me nota haciendo trampa es verdad que armara un drama, no quiero tener que estar media hora disculpándome por cosas sencillas. Estuvo diciendo detalles de la boda, la cual sería muy sencilla pues no queríamos nada complicado, solo queríamos que estuviéramos mi familia, amigos muy cercanos, Jungkook y su familia.

Sentí que el auto se detuvo, seguía sin ver nada, Jinri me llevo de la mano todo el trayecto.

—Me estoy poniendo nerviosa Jinri, ¿estamos en un elevador?

—Busque un lugar que te diera recuerdos buenos.

—Por dios ahora estoy más nerviosa —hice el intento de quitarme la venda.

—No te atrevas Chang Seoyun— me dio un manotazo —no te vuelvo hablar hasta la boda si lo haces.

Mejor le seguí el juego, cuando se abrió la puerta del ascensor, me empezaron a sudar las manos, ¿Qué clase de club de strippers tiene un elevador? Tengo miedo que sea más de lo que puedo manejar.

—Bien, ya falta poco para llegar.

Sentí que cambio el ambiente, algo más silencioso de lo que esperaba, pero el aroma que había en el aire se sentía tenue y algo conocido, me hizo sentarme en una especie de sofá, al menos es lo que creí por la textura.

—No muevas las manos de los descansa brazos, iré a mi lugar, no te quites la venda hasta que te diga.

—Está bien, pero si me da algo aquí será tu culpa.

—Tengo todo previsto.

Me sentí sola por un momento, escuche de nuevo una puerta, ahora la música comenzaba de manera lenta, casi sentía el pulso en mi cuello, tocaron mis muñecas, para ir subiendo por mis brazos, intente apartarlos.

—No te muevas—Esa voz la reconozco— usted no puede moverse hasta que se lo diga Noona.

—¿Jungko....

Sentí una presión en los labios, quería sentir un poco más, pero se alejó.

—Tampoco habla sin que se lo pida.

Que me esté hablando de usted me descoloca. Sus manos se deslizaron por mis hombros, entendí por qué eligió mi vestimenta de esta noche, sentía que era un vestido algo revelador pero la palma de sus manos dejando caricias en la piel expuesta hasta mi cuello, causaba un efecto demasiado placentero, más que sensorial.