Engaño

Capítulo 3.

Ran y Rindou tenían ordenes claras. 

Matar a Sanzu

Traer de vuelta a Takemichi y a su cachorro.

Lo primero que debían hacer era localizarlos lo mas pronto posible, asi que pusieron manos a la obra y dispusieron de subordinados para comenzar la recolección de información.

Comenzaron buscando en los lugares que Sanzu tenia a su disposición y los giros de dinero que podría haber hecho en algún lado o cualquier compra que pudiera haber realizado con cualquiera de sus tarjetas. Pero no lograron mucho con eso, Haruchiyo no se encontraba en ninguna de sus propiedades obviamente, pensaban los hermanos, pero de todas formas tenian que revisar. Al parecer solo había sacado dinero una vez en una tienda de convivencia en Tokyo, lo cual no les decia nada.

Luego de que su investigacion fallara y no por que fueran ineptos, si no por que Sanzu sabía realmente como ocultarse cuando se requería, no les quedo otra opción mas que ponerle el precio a su cabeza, darian dinero a cambio de alguna buena información. Y asi es como recibieron el dato de un hombre con peculiar corte de cabello color rosa estaba en un pequeño pueblo a las afueras de Tokyo.

Llegar a aquel lugar fue facil, lo dificil fue encontrar el lugar exacto en el que estaba. Ran y Rindou se repartieron la tarea de preguntar a algunos vecinos de la zona si habrian visto a un hombre de cabello rosa, pero nadie sabia de alguien con esa descripción.

Un dia, sentados en el auto de Ran, ya sin saber a quien preguntar o que hacer, lo vieron pasar. Sanzu iba caminando hacia un pequeño complejo de departamentos con un par de bolsas en la mano.

Era su oportunidad.

Lo siguieron sin que lo notara hasta la puerta de su apartamento, lo acorralaron y le pidieron que no armara un escandalo.

—Bienvenido Haru, trajiste lo que te pe...Ran, Rindou...C-como.

—Hola presiosura, esto sera rapido ¿si?— le saludo Ran como si nada.

Haruchiyo se mantenia tranquilo, sabía que esto tarde o temprano sucederia, no podía escapar de Mikey.

—¡Porfavor, Ran no lo hagas!—Sollozo Takemichi asustado, liberando un amargo olor.

El mayor de los Haitani apunto su arma directo al corazón de Haruchiyo.

—No es nada personal Takemichi, debes venir con nosotros, no lo hagas mas complicado— dijo Rindou sujetandolo por los brazos para que no interfiriera, debilitandolo con sus feromonas dominantes.

—Ademas, este de aquí se atrevio a secuestrar al hijo y novio del jefe, eso es imperdonable—acoto Ran.

—¡El bebe no es de Manjiro! porfavor, si me llevan alli me matara y a mi hijo tambien– sollozo el omega en una suplica lastimera.

—¿Que?— soltaron los hermanos Haitani sorprendidos.

.....

Estaban todos sentados en la pequeña mesa del comedor, Takemichi habían preparado cafe para los cuatro mientras intentaban pensar.

—No puedo creer que tuvieras los huevos para cogerte a la novio del jefe Sanzu, habiendo tantas maneras de morir— dijo Rindou con ironia.

—La verdad a mi me importa una mierda Haruchiyo, solo no quiero que Mikey asesine a una madre y su cachorro— dijo Ran sincerandose.

De pronto escucharon un pequeño llanto de bebe interrumpir la incomoda situacion. Antes de que Takemichi pudiese levantarse de su lugar, Rindou ya se había levantado a por el bebe. Cuando regreso con el pequeño en brazos se lo mostro sorprendido a su hermano.